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¿Qué es un aneurisma y cómo puede afectarte?

En EE.UU., se estima que 6,7 millones de personas tienen un aneurisma cerebral y hasta 15 millones podrían tener aneurismas intracraneales

¿Qué es un aneurisma y cómo puede afectarte?

Antes de que un aneurisma cerebral se rompa, puede ser difícil de reconocer. Crédito: 19 STUDIO | Shutterstock

Un aneurisma es una protuberancia o abombamiento en las paredes de un vaso sanguíneo debido a un debilitamiento de su pared, que puede formarse en cualquier vaso, pero es más común en ciertas arterias como la aorta o las cerebrales.

El riesgo principal es que, al aumentar de tamaño, el aneurisma puede romperse, causando hemorragias graves que pueden ser mortales.

Según registros oficiales, En EE.UU., se estima que 6,7 millones de personas tienen un aneurisma cerebral y hasta 15 millones podrían tener aneurismas intracraneales. Cada año, alrededor de 30,000 a 40,000 aneurismas cerebrales se rompen, causando unas 15,000 muertes anuales y la rotura de aneurismas aórticos es la decimotercera causa de muerte en el país. La prevalencia aumenta con la edad, el sexo masculino y el tabaquismo, siendo los aneurismas intracraneales más comunes entre los 30 y 60 años y más frecuentes en mujeres. 

Métodos de atención

En casos en que el aneurisma aún no se ha roto y representa bajo riesgo, se puede optar por un monitoreo con estudios de imágenes y controles médicos frecuentes para vigilar su evolución. En situaciones de emergencia, donde hay ruptura, la cirugía es necesaria de inmediato.

Para atender un aneurisma, existen principalmente dos métodos: la cirugía abierta (clipaje) y la reparación endovascular (embolización). En la cirugía abierta se coloca una pinza de metal en la base del aneurisma para evitar su ruptura, mientras que en la reparación endovascular se insertan microespirales o stents a través de un catéter, que bloquean el flujo sanguíneo hacia el aneurisma y previenen la ruptura.

Estos procedimientos buscan evitar la rotura o detener el sangrado en caso de que ya haya ocurrido. Además, el tratamiento puede incluir medicamentos para controlar factores de riesgo como la presión arterial y el colesterol.

Tipos de aneurismas

Los tipos de aneurismas se pueden clasificar principalmente según su forma, localización y origen. Los principales tipos son:

  • Aneurismas saculares: Son los más comunes, tienen forma de saco o bulto que sobresale de un lado de la arteria, pareciendo una “baya”. Son comunes en las arterias cerebrales y también pueden encontrarse en la aorta. Son asimétricos y tienen una boca estrecha que conecta con la arteria principal.
  • Aneurismas fusiformes: Afectan toda la circunferencia de la arteria, causando un ensanchamiento tubular en toda la pared del vaso. Son morfológicamente alargados y sin una boca estrecha. Son más difíciles de tratar que los saculares.
  • Aneurismas micóticos: Son aneurismas causados por infecciones que debilitan la pared arterial, generalmente de origen bacteriano, y pueden estar presentes tanto en aneurismas cerebrales como en otros vasos.
  • Aneurismas verdaderos y falsos (pseudoaneurismas): Los verdaderos involucran las tres capas de la pared arterial (íntima, media y adventicia). Los falsos no afectan a todas las capas y consisten en una acumulación de sangre fuera del vaso contenida por tejidos circundantes, generalmente causados por trauma o procedimientos invasivos.

En cuanto a la localización, destacan los aneurismas cerebrales (intracraneales) y los aneurismas aórticos, que también se pueden clasificar como saculares o fusiformes dependiendo de su morfología.

En cuento a la localización, se puede clasificar:

Aneurisma de la aorta:

  • Aneurisma aórtico abdominal (AAA): Se forma en la parte de la aorta que atraviesa el abdomen.
  • Aneurisma aórtico torácico (TAA): Se presenta en la parte superior de la aorta, en el tórax.
  • Aneurisma tóracoabdominal: Afecta ambas secciones de la aorta torácica y abdominal. 

Aneurisma cerebral:

  • Se localiza en los vasos sanguíneos del cerebro y puede causar hemorragias cerebrales si se rompe. 

Aneurisma periférico:

  • Afecta las arterias fuera del corazón y el cerebro, como las arterias femorales (en el muslo) o poplíteas (detrás de la rodilla). 

Aneurisma visceral:

  • Ocurre en las arterias que suministran sangre a órganos internos como el bazo o los intestinos. 

Aneurisma ventricular:

  • Se desarrolla en la pared del ventrículo izquierdo del corazón, a menudo después de un infarto de miocardio. 

Cómo reconocer un aneurisma cerebral antes que se rompa

Antes de que un aneurisma cerebral se rompa, puede ser difícil de reconocer porque muchos no causan síntomas evidentes. Sin embargo, algunos signos pueden sugerir su presencia:

  • Molestias o dolor localizado en un lado de la cabeza.
  • Visión doble o borrosa intermitente y dificultad para enfocar objetos cercanos.
  • Sensibilidad a la luz o a sonidos fuertes.
  • Dolor sobre o detrás del ojo.
  • Pupila dilatada o párpado caído.
  • Entumecimiento o debilidad en un lado de la cara.
  • Cambios en la visión o pérdida parcial de la visión.

Estos síntomas suelen ocurrir porque el aneurisma ejerce presión sobre los nervios o tejidos cercanos en el cerebro. En muchos casos, los aneurismas intactos no producen síntomas y se detectan por imágenes realizadas por otras razones médicas.

Para diagnosticar un aneurisma antes de que se rompa, los médicos utilizan pruebas de imagen avanzadas como tomografía computarizada, resonancia magnética y angiografía cerebral, que pueden detectar la protuberancia incluso si no hay síntomas visibles.

Ante cualquier síntoma inusual de dolor de cabeza o alteraciones visuales, es importante buscar atención médica para evaluación y diagnóstico temprano, lo que puede prevenir la ruptura y sus graves consecuencias.

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