Agentes del orden permanecerán en las escuelas públicas de L.A.
Junta de Supervisores vota para renovar contrato; piden mejoras al Departamento del Sheriff
La Junta de Supervisores del condado de Los Ángeles votó ayer para renovar el contrato por otros dos años para que agentes del orden cuiden de las escuelas públicas.
Sin embargo, también se pidió al jefe del Departamento del Sheriff Jim McDonnell que defina mejor su rol en los diversos centros de estudios y que los agentes cuenten con más entrenamiento.
El supervisor Mark Ridley-Thomas recomendó que se preparen en temas como desarrollo adolescente, traumas en la infancia, solución de conflictos y cómo reducir incidentes en los planteles.
Ridley-Thomas y la supervisora Hilda Solís, quien fue coautora de la moción, señalaron que el aumento de las autoridades en las eccuelas se debía a el incremento de tiroteos en los campus y la política de “tolerancia cero” al mal comportamiento.
Ambos urgieron buscar mejores prácticas.
“Queremos ver a los jóvenes desarrollarse y no expulsiones innecesarias”, dijo Solís y añadió que le gustaría tener más datos sobre la efectividad del programa de la autoridad en las escuelas.
La supervisora Sheila Kuehl votó en contra de este plan. “Creo es totalmente inapropiado tener algún tipo de agentes del orden armado en nuestros campus”, señaló.
Un estudio publicado en el Diario de Justicia Criminal en 2009 encontró que los alumnos que contaban con agentes de recursos estudiantiles (SROs) eran tres veces más propensos a ser arrestados.
La ACLU también encontró que la mayoría de distritos escolares le daban a los empleados discreción de llamar a la policía para hacerse cargo de problemas que van desde bullying a vandalismo.
No obstante, varios agentes creen que tener el programa, llamado SRO, previene suicidios, peleas y ayuda a mantener las drogas fuera del campus.
La supervisora Janice Hahn dijo haber escuchado comentarios positivos sobre el programa y cree que tener personal policial en las escuelas podría ayudar construir una “interacción positiva con los agentes del orden”.
Veinte distritos escolares participan en el programa y cuentan o bien con un agente armado en el campus o un policía disponible por teléfono.