Ana Tijoux
La carrera musical de Ana Tijoux tiene un largo recorrido, pero su nombre traspasó fronteras cuando en 2010 recibió una nominación al Grammy por su primer disco como solista titulado 1977. La rapera, nacida en Francia, debido al exilio de sus padres tras el golpe militar en Chile de 1973, tiene una voz y un estilo muy particular. Sus inicios musicales fueron con la banda chilena de rap Makiza, pero al separarse de ella inicia otros proyectos musicales y graba con la mexicana Julieta Venegas el tema Lo que tú me das. Y en 2007 vuelve a colaborar con ella en el tema Eres para mí. La música de Tijoux, sin embargo, resalta por sus temas de contenido social ya que, reconoce, no le gusta apostar solo por una sola temática.
¿Qué fue lo que te identificó con el hip-hop y el rap?
Me pareció muy cercano a mí. Me sentí muy identificada con estos géneros.
Tus temas están cargados de contenido social. ¿Qué te llevó a ello?
Es que mis temas no solo hablan de eso. No me gusta cerrarme a un tópico: hay que ser libre para crear y hablo de toda temática.
Pero las piezas con contenido social suelen ser a veces las más interesantes. La gente se detiene más a escucharlas y son las que sobresalen en tu caso.
Porque a la gente de repente le choca cuando una habla de política siendo creador, cuando en realidad la política influencia a todas las artes. La política define nuestro modo de vivir, nuestra manera de ver las cosas y es social. El arte no está ajeno a ello.
¿Cómo fue tu experiencia al llegar a Chile y encontrarte con una cultura que habías vivido desde el extranjero?
Fue duro, pero también fue una experiencia bonita el entender y comprender, de alguna manera, el cambio entre Latinoamérica y Europa. Me gustó mucho y fue necesario para mí.
‘La bala’ no es un álbum tan autobiográfico como el primero…
Sí. 1977 era como una reflexión hacia dentro, por definirlo de alguna manera, y es mucho más musical en términos creativos. Fue bonito darse el placer de jugar y meter música y letra, y mezclar todo en una sola olla. Este habla más de todo.
‘Sacar la voz’ es uno de tus nuevos sencillos y el video muestra la represión a la libertad de expresión. ¿Era ese el objetivo?
El primer objetivo del video era emocionar y mostrar de una manera simple esa expresión de libertad. El uso de la capucha en las personas era [para] mostrar que, detrás de cada ser humano hay alguien queriendo hablar por ellos. Otro objetivo era como descriminalizar lo que se ha criminalizado a través de los medios de comunicación más convencionales. Por eso era importante mostrar familias y gente de toda clase social.
Eres la máxima exponente del hip-hop chileno y la única -después de La ley en 2000- con una nominación al Grammy. ¿Qué significado tiene para ti?
Es muy bonito porque, finalmente, es poder demostrar que, desde el sur de Chile, desde el último país de Sudamérica, hay talento. [Es] un género que muchas veces no es considerado música, [pero el] disco fue hecho a pulso, de una manera muy artesanal. Entrar en las grandes ligas, más que hablar de mí, fue un logro para muchos amigos. Fue algo que festejamos de manera muy bonita entre nosotros. Un logro como país y como músicos.
En Chile han surgido muy buenos músicos. Sin embargo, no permanecen mucho en el escenario y los que están, sufren para quedrase. ¿A qué se debe?
Yo creo que es la cosa geográfica que no nos ayuda mucho como país, pero también creo que es cuestión de que en nuestro país, no se entiende el talento que se tiene y no se invierte. Hay mucho artista invisible [y] no hay apoyo para la cultura.