Preparando a conductores
Maestros, estudiantes y líderes de la comunidad se unen para crear conciencia sobre la seguridad al conducir.
La tecnología permite actualmente que las personas, especialmente los adolescentes, puedan hacer una llamada telefónica enviar mensajes de textos, revisar correos electrónicos e incluso actualizar información en las redes sociales, lo cual es inofensivo si se encuentra en su oficina, escuela, hogar o cualquier sitio público. ¿Pero, que sucede cuando se esta conduciendo, especialmente si es una persona joven?
Esa inquietud fue el tema abordado ayer durante el evento “Adolescentes que conducen distraídos”, patrocinado por AT&T para crear conciencia sobre el peligro de contestar, y realizar llamadas telefónicas o responder o enviar mensajes de textos mientras se conduce.
El evento se llevó a cabo en el auditorio de la Escuela Preparatoria Leuzinger en Landawle y fue organizado por un grupo de estudiantes del mismo, quienes fueron escogidos por la Organización Nacional de Seguridad Juvenil para organizar una campaña y crear conciencia en la comunidad sobre la importancia de la seguridad al conducir.
“Queremos educar a la comunidad, crear conciencia sobre los adolescente que se distraen mientras están conduciendo”, dijo Lissette Morales, maestra de inglés y consejera en Leuzinger y coordinadora del grupo de estudiantes organizadores del evento. “La mayoría de los estudiantes creen que son conductores alertas y experimentados pero cuando se colocan detrás del volante nos damos cuenta de que no lo son porque se distraen fácilmente con llamadas telefónicas, mensajes de texto e incluso maquillándose”.
La actividad contó con la participación del asambleísta Steven Bradford, del distrito 51, Rebecca Thomas, oficial de la Patrulla de Carreteras de California (CHP), Kelly Brown, de la organización Impact Teen Drivers, Ángela Gibson, representante de AT&T y el joven Andrew Murray, quien con solo 15 años aun no posee licencia para conducir en California pero ya cuenta con una licencia de conductor de autos NASCAR .
. “Queremos educar a los jóvenes de California y de todo el país sobre los peligros de enviar y responder mensajes de texto mientras se conduce”, dijo Gibson.
“Esta es una campaña nacional de conciencia pública patrocinada por AT&T para pedirle a todos los conductores, especialmente a los adolescentes, que los mensajes de texto deben dejarse a un lado hasta que la persona haya detenido su auto”, agregó.
Durante el evento los asistentes, entre los que se encontraban jóvenes que ya tienen permiso de conducir, respondieron a una encuesta rápida para determinar sin eran conductores distraídos.
También observaron videos sobre diferentes historias de adolescentes que habían muerto o sufrido lesiones que cambiaron sus vidas, debido a accidentes de transito sufridos por su distracción mientras conducían o que involucraban otros conductores distraídos.
“Ustedes tienen una opción cada vez que se sientan detrás de un volante”, dijo Browning, “No pueden evitar que otra persona los golpee con su auto mientras ustedes están al volante pero pueden controlar los factores de distracción mientras conducen”.
Además de las historias de los jóvenes mostrados en los videos, los asistentes tuvieron la oportunidad de escuchar la propia historia de Rebecca Thomas quien, como oficial del CHP muchas veces tuvo que comunicarse con padres para darles la noticia de la muerte de sus hijos. Sin embargo, en noviembre pasado fue ella quien recibió una llamada en la que le anunciaron la muerte de su hijo en un accidente automovilístico.
“Cuando ocurre este tipo de accidente, afecta a muchas personas”, dijo. “No solo afecta a los padres sino también al resto de la familia, personas de la comunidad y amigos de la escuela”, dijo.
Al final del evento los jóvenes firmaron una hoja en la que se comprometían a luchar contra la distracción durante el manejo, las cuales se colocarían en una de las carteleras de la escuela.
Asimismo, tuvieron la oportunidad de admirar y tomarse fotos junto al auto NASCAR que el joven Murray trajo a la escuela.