‘Soñadores’ se integrarían a la fuerza productiva
Soñadores añadirán energía a economía de CalifPedro Ramírez, el único indocumentado que ha sido presidente de los estudiantes en universidad alguna en California, se rie solo desde que el presidente Obama ordenó la semana pasada al Departamento de Seguridad Interna, parar las deportaciones de cerca de 800,000 jóvenes que vinieron antes de los 16 años y no tienen más de 30 años ni historial criminal.
SACRAMENTO.- Pedro Ramírez, el único indocumentado que ha sido presidente de los estudiantes en universidad alguna en California, se ríe solo desde que el presidente Obama ordenó la semana pasada al Departamento de Seguridad Interna, parar las deportaciones de cerca de 800,000 jóvenes que vinieron antes de los 16 años y no tienen más de 30 años ni historial criminal.
Esa alegría es mayor debido a que en la orden de Obama para los muchachos conocidos como soñadores graduados de secundarias y universidades, vienen incluidos los permisos de trabajo para que puedan laboral legalmente.
“Estoy trabajando para una fundación de la universidad mientras hago mi maestría en Administración Pública y me pagan con becas, pero cuando tenga mi permiso de trabajo podré cobrar dinero”, comentó entusiasmado.
Como muchos jóvenes sin residencia legal en este país, Pedro Ramírez se ganó la vida cuando iba a la Universidad Estatal de California (CSU) en Fresno en una economía subterránea, limpiando patios y oficinas, cobrando en efectivo.
“Yo no tengo duda de que nuestra participación en el mercado laboral va a ser una oportunidad para que contribuyamos más a este país y paguemos más impuestos”, dijo Ramírez, ex presidente de la Asociación de Estudiantes de CSU Fresno.
De los 800,000 jóvenes que podrían calificar para la orden ejecutiva de Obama, 26% están en California, de acuerdo al Instituto de Política de Migración. Estaríamos hablando de unos 250,000 soñadores que calificarían para obtener un permiso de trabajo en el estado.
Pero con un permiso de trabajo no viene una cascada de ofertas de empleo sobre todo cuando California tiene una tasa de desempleo de 10.8%.
Según el Departamento del Empleo (EDD) las tasas de desocupación para quienes tienen entre 20 y 30 años oscila entre el 9.0 al 16.9%. Entre los jóvenes de 16 a 19 años es de 35.5%.
“A corto plazo pueden ser una competencia pero hay que tomar en cuenta que ya trabajan, cobran por debajo de la mesa, y no ganan lo que deben”, señaló el profesor Manuel Pastor, uno de los directores del Centro de Estudios de Integración de los Inmigrantes de la Universidad del Sur de California (USC).
Sin embargo, apuntó que a la larga esos jóvenes van a añadir energía a la economía de California con sus ingresos.
“Tienen mucha ambición y energía, y muchos de ellos pueden convertirse en empresarios y crear empleos”, señaló.
El abogado Mark Silverman, director de Políticas de Migración en el Centro de Recursos Legales de los Inmigrantes (ILRC) dijo que no hay duda que los estudiantes soñadores van a encontrar una economía que es una pesadilla.
Consideró no obstante que tendrán oportunidades de obtener un lugar en el mercado laboral porque la mayoría de ellos son bilingües, hablan dos idiomas y eso les da ventaja.
“Con estos permisos viene un seguro social y una licencia de conducir. Viene un cambio de vida para los estudiantes que califiquen. Los motivará a ir a la universidad y les da más posibilidades de continuar educándose”, sostuvo Silverman también contento.
Muchos jóvenes indocumentados al graduarse de las universidades se ven forzados a laborar en empleos muy por abajo de las capacidades que adquirieron en la educación superior.
El economista Stephen Levy, director del Centro de Estudios Avanzados de la Economía de California (CCSCE) con sede en Palo Alto dijo que una vez que la recesión termine los jóvenes soñadores podrán ir a ocupaciones de acuerdo a sus habilidades.
“Ahora están por debajo de su potencial, y el anuncio de Obama es algo muy positivo para la economía porque necesitamos gente preparada como los dreamers”, destacó.