Capacidades sociales y analíticas, un terreno en el que destacan las mujeres
Las habilidades mecánicas se demandan mucho menos en el mercado laboral
En diciembre había 109,000 más mujeres que hombres con trabajo remunerado. Es la primera vez en mucho tiempo que eso ocurre. Por más que el porcentaje de diferencia sea mínimo (el 50.04% de los empleos) la tendencia ha ido progresivamente en aumento, según las cifras del Bureau of Labor Statistics (BLS).
Y seguirá ocurriendo a juzgar por las conclusiones del estudio del Pew Research Center que apunta a que los empleadores quieren contratar a personas con capacidades sociales y analíticas además de específicas de varias profesiones. Programadores de computación, trabajadores sociales, abogados, obstetras, etcétera, que requieren tanto las específicas como las sociales son empleos cuya demanda ha crecido mucho más rápido que la generalidad del mercado de trabajo mientras que apenas ha habido cambios en empleos que requieren habilidades mecánicas.
A la hora de contar con dotes de negociación, persuasión, pensamiento crítico y capacidad para escribir además de tener conocimientos en ciencia y matemáticas las mujeres se han situado en las primeras filas.
De acuerdo con Pew Research Center, las mujeres ya son mayoría, el 52%, en los empleos en los que lo más importante es tener una capacidad fundamental para el trabajo (como la formación legal, magisterio o asesoría) o social. En el caso de trabajos como capacidades analíticas como contabilidad el número de mujeres ha crecido rápidamente en las últimas cuatro décadas.
El mayor nivel de formación académica de las mujeres y el hecho de que estén en ocupaciones de altas capacitaciones ha ayudado a reducir la brecha salarial que aún les separa de los hombres. Aunque estas irritantes diferencias no se han eliminado y son muy relevantes en el caso de las mujeres latinas, en los últimos años ha habido avances a la hora de estrechar esa brecha y desde 1980 hasta 2018 el salario medio por hora de las mujeres ha crecido un 45% frente al 14% de los hombres.
Con todo incluso en los empleos en los que se piden capacidades técnicas específicas y sociales los hombres ganan más. Desde el Pew Research Center se atribuye esta brecha a factores como las horas que se trabajan y otras cuestiones difíciles de medir como la discriminación y la influencia de las diferentes redes profesionales de unos y otras.
La demanda de trabajos que cuentan con una formación intelectual y académica mayor son los que más están creciendo y donde mejores salarios se están pagando a la generalidad de los trabajadores. Arquitectos de bases de datos, especialistas de enfermería pero también diseñadores de videojuegos son algunos de los empleos que llegan de las manos de las nuevas tecnologías y exigen algo más que una mecánica de trabajo.