Romney acusa a Obama de filtrar información secreta
El candidato republicano dijo que el gobierno del Presidente divulgó algunos datos confidenciales relacionados con el ataque en Pakistán que mató al cabecilla de Al Qaeda, Osama bin Laden
Washington – El virtual candidato republicano a la Presidencia de EE.UU., Mitt Romney, responsabilizó hoy al mandatario Barack Obama de las recientes filtraciones de datos secretos y que, a su juicio, ponen en riesgo la seguridad de las tropas estadounidenses.
Durante un discurso ante un foro de veteranos en Reno (Nevada), Romney acusó al Gobierno de Obama de filtrar datos secretos a la prensa en busca de una ventaja política, y pidió una “plena y pronta” investigación.
Romney citó informes de que el primer secretario de Defensa de Obama, Robert Gates, instó a miembros de la Casa Blanca a que “se callaran” y dejaran de divulgar datos secretos, algunos relacionados con el ataque en Pakistán en mayo de 2011 que logró la muerte del cabecilla de Al Qaeda, Osama bin Laden.
“La vida de hombres y mujeres en activo está en juego. Sorprendentemente, la Administración no logró cambiar sus formas, y se filtraron más operaciones secretas, incluso algunas que implicaban acción encubierta en Irán”, manifestó Romney, ante la 113 convención anual del grupo Veteranos de Guerras Extranjeras (VFW, por su sigla en inglés), una de las organizaciones de veteranos más importante y más antigua de EE.UU..
Obama se presentó ante ese mismo foro ayer, en un discurso en el que defendió sus logros en materia de defensa y seguridad nacional, incluyendo el fin de dos guerras, la muerte de bin Laden, y medidas para mejorar el bienestar de los militares y sus familias.
El presidente de EE.UU. acusó a los republicanos de no lograr un acuerdo para evitar los recortes masivos al presupuesto federal, incluyendo fondos del Pentágono a partir del próximo 1 de enero.
Apartándose de su usual enfoque en la economía, Romney atacó de forma frontal a Obama respecto a las filtraciones, en unos momentos en que ambos cortejan activamente el voto de los veteranos de guerra, un bloque que conformó el 15 % del electorado en 2008 y es clave en estados como Virginia, Colorado, Florida, Carolina del Norte y Ohio.
“Esta conducta es deleznable. Es algo que traiciona nuestro interés nacional, y compromete a nuestros hombres y mujeres sobre el terreno. Merece una plena y pronta investigación de un fiscal especial, con explicaciones y consecuencias”, subrayó Romney.
“Quien haya divulgado a la prensa información secreta, buscando ventaja política para la Administración, debe quedar expuesto, despedido y castigado. Se acabó el tiempo de demoras”, enfatizó.
El Departamento de Justicia ya ha designado a dos fiscales federales para liderar las investigaciones, pero algunos republicanos exigen un fiscal especial que actúe, según ellos, con independencia jurídica.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, salió al paso de los ataques de Romney, al señalar que Obama no tolera filtraciones.
“El presidente ha dejado abundantemente en claro que no tiene tolerancia alguna por las filtraciones y cree que éstas perjudican nuestros intereses de seguridad nacional”, subrayó Carney a los periodistas que acompañan a Obama en su gira por la costa Oeste del país.
La campaña de reelección de Obama consideró que Romney ha recurrido a “ataques bajos” que “carecen de credibilidad”, en vez de explicar con claridad su política exterior.
Romney se apoyó en unas declaraciones que hizo en un foro ayer la presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, la demócrata Dianne Feinstein, en el sentido de que, a su juicio, la Casa Blanca es parcialmente responsable de las filtraciones.
No obstante, Feinstein dejó en claro que Obama, que recibe a diario informes de inteligencia, no ha sido la fuente de las filtraciones.
Pero hoy, en un comunicado, Feinstein se retractó de sus comentarios ante el Consejo de Asuntos Mundiales.
“Dije que no creía que el presidente filtró información secreta. No debí haber especulado más allá de eso, porque el hecho es que no sé quién es la fuente de las filtraciones”, dijo Feinstein, al lamentar que Romney haya usado sus comentarios en contra de Obama.
En su discurso ante los veteranos, Romney criticó los posibles recortes adicionales de $500,000 millones al Pentágono a partir de enero próximo, si el Congreso no logra un acuerdo para prevenirlos.
También atacó la gestión económica de Obama y su liderazgo mundial, incluyendo su “flexibilidad” hacia los rusos, y su trato hacia Israel “como si nuestro aliado más estrecho en Oriente Medio fuese el problema”.
“El pueblo de Israel merece algo mejor de lo que ha recibido del líder del mundo libre”, aseguró Romney, quien hoy mismo partirá en su primera gira internacional a Inglaterra, Polonia e Israel.
Asimismo, prometió que, si gana la Presidencia en noviembre próximo, él hará frente a las “trampas” comerciales de China, y la amenaza nuclear de Irán.
“Les prometo que si me convierto en comandante en jefe, usaré todos los medios necesarios para protegernos y la región, y para prevenir que ocurra lo peor cuando aún hay tiempo”, prometió.
Además de cortejar el voto de los veteranos, tanto Romney como Obama han participado en sendos actos de recaudación de fondos, a menos de cuatro meses de los comicios generales.