Desarticulan una banda que se dedicaba al robo de bebés en México para venderlos

La violencia en México parece imparable, pero los esfuerzos para frenarla tampoco cesan, recientemente se desarticuló una banda dedicada al  secuestro y venta de menores, especialmente de bebés, los cuales son arrancados de los brazos de las propias madres para poder venderlos, algo que sucede principalmente en el estado de Chiapas.

Gracias a una denuncia hecha ante el Ministerio Público por el secuestro de un menor, la Fiscalía Especial para la Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada atrajo el caso y logró el arresto de seis presuntos miembros de una red de secuestradores de menores, la cual operaba en los estados mexicanos de Morelos, Puebla y Chiapas, que era el destino de venta de los menores.

En la ciudad de Cuautla, Morelos fue detenido uno de los hombres, que era el encargado de falsificar las actas de nacimiento para modificar la identidad de los menores sustraídos.

En Oaxaca fueron detenidos otros dos miembros de la red, un hombre y una mujer, quienes se encargaban del traslado de los menores a Chiapas.

Los otros tres detenidos durante el operativo fueron dejados en libertad porque, a decir del juez del Ministerio Público Federal, no se encontraron pruebas suficientes que los vincularan a los delitos de los que se les acusaban, a pesar de que se acreditó que dos de ellos se encargaban de conseguir a las víctimas y la otra persona se encargaba del cuidado de los niños y bebés hasta que eran vendidos.

Las víctimas

Uno de los casos ocurrió en Cuautla, Morelos, un bebé fue robado de brazos de su madre, quién fue asesinada junto con su otra hija mejor, y cuyos cuerpos fueron encontrados en una carretera cercana.

La madre del menor se dedicaba a la venta de pulseras en un mercado de Cuautla, Morelos, cuando la madre de la mujer detenida en Oaxaca realizó un pedido grande de su producto.

Con el fin de recibir parte del dinero, la madre del menor secuestrado acudió al punto de encuentro con sus dos hijos y su esposo, quien los ayudó a subir en la camioneta donde se encontraban la mujer detenida, identificada como Dalindy y su madre.

Ese fue el modus operandi en esta ocasión: torturar a la madre y hermana del menor, asesinarlas y secuestrar al bebé, quien fue declarado como desaparecido desde el día de los hechos, el 2 de julio hasta el 13 de septiembre en que fue rescatado por agentes federales en Jiquipila, Chiapas.

Las autoridades siguieron investigando y rescataron a otros dos menores de edad en este mismo estado, logrando así desmantelar esta banda criminal.

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