Trump amplifica las falsedades sobre los inmigrantes en su visita a Aurora

El expresidente Donald Trump llevó el viernes su mensaje de línea dura sobre inmigración a la ciudad de Aurora, en Colorado, una comunidad que ha demonizado por estar invadida por inmigrantes delincuentes, a pesar del rechazo de sus líderes locales.

En las últimas semanas, Trump ha mencionado repetidamente a Aurora en discursos y en el escenario de debates, comparando el suburbio de Denver con una “zona de guerra”.

Trump continúa repitiendo las afirmaciones de que una pandilla venezolana se ha apoderado de edificios de apartamentos en la ciudad. Los funcionarios locales, incluido el alcalde republicano de Aurora, Mike Coffman, han dicho que las afirmaciones son falsas y una gran exageración.

Trump continúa diciendo que los “malos genes” son los culpables de que las personas que están en el país ilegalmente hayan cometido asesinatos, repitió sus advertencias sobre una “invasión” de migrantes y sugirió que el manejo de los problemas fronterizos por parte de la vicepresidenta Kamala Harris demuestra que tiene “discapacidad mental”.

En un multitudinario mitin, Trump elevó el tono de las ideas xenofóbicas que han marcado el ritmo de su campaña, asegurando que los migrantes venezolanos han “infectado” Aurora y prometió “limpiar” el país si es elegido a la presidencia.

“El 5 de noviembre voy a rescatar a todas las ciudades que han sido invadidas y conquistadas”, subrayó el expresidente, entre vítores de los asistentes.

Trump dijo que una afluencia de violentos pandilleros del Tren de Aragua procedentes de prisiones venezolanas han “invadido y conquistado” Aurora y culpó a Harris por importar “un ejército de pandilleros extranjeros ilegales y criminales migrantes de las mazmorras del Tercer Mundo”.

El viernes, Trump estaba de pie frente a carteles que decían “deportar a los ilegales ahora” y “acabar con el crimen migratorio”, y dijo que Estados Unidos está “ocupado por una fuerza criminal”.

Si es elegido en noviembre, Trump dijo que lanzará un programa de deportación, “Operación Aurora”, bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para desmantelar las “redes criminales de inmigrantes ilegales” que operan en Estados Unidos.

La ley fue invocada por última vez durante la Segunda Guerra Mundial para internar a inmigrantes de ascendencia japonesa, alemana e italiana.

Trump habló enfrente de una pared falsa, decorada con las palabras “deporten a todos los ilegales ahora” y estuvo parado en medio de las fotos de dos inmigrantes que fueron señalados por las autoridades locales como miembros de la pandilla venezolana Tren de Aragua.

Varios republicanos estuvieron presentes en el mitin para apoyar a Trump, pero el alcalde Coffman no estuvo presente. Coffman ha sido franco al refutar las afirmaciones de Trump sobre Aurora, sin llegar a criticar al expresidente.

Los líderes demócratas de Colorado, entre ellos el gobernador Jared Polis y los senadores Michael Bennet y John Hickenlooper, ofrecieron una conferencia de prensa antes del mitin de Trump el viernes, en la que criticaron al expresidente por difundir afirmaciones falsas sobre Aurora para su propio beneficio político.

“Donald Trump se ha invitado a Aurora para hacer lo que mejor sabe hacer, que es demonizar a los inmigrantes, mentir y servir a sus propios fines políticos. Y no podemos permitir que nos divida más”, dijo Bennet.

El gobernador Polis dijo que Harris lucharía por comunidades como Aurora “y no trataría de derribarlas para un truco político”. Trump atacó a Polis por su nombre en el mitin, llamándolo “débil e ineficaz”.

Sigue leyendo:
• Alcalde de Aurora niega que sea una ciudad invadida por pandillas venezolanas
• DHS aclara que Trump usa datos “malinterpretados” sobre inmigrantes y crímenes
• Informe de Brennan Center denuncia qué hay detrás de la Ley de Enemigos Extranjeros