Vecinos de Sur Los Ángeles no quieren homeless en sus barrios
Alegan que su presencia ha traido un aumento en los robos, la prostitución, la venta de drogas a esta zona de la ciudad
A plena luz del día y casi frente a sus ojos, Ruth Morales fue víctima del robo de tres bicicletas de su patio. “Hace unos meses mataron a una mujer aquí frente a mi casa”, asegura.
A María Elena Salamanca se le hace eterno la caminata que tiene que dar entre los grupos de desamparados desde donde estaciona su auto hasta su casa. “Camino con mucho miedo de que me hagan algo. Al cerrar la puerta respiró aliviada”, relata.
Ambas atribuyen los robos, la venta de drogas y prostitución al alarmante número de desamparados que se han instalado con sus carpas frentes a sus casas. Ayer pideron un alto y la intervención de las autoridades.
Aseguran que la lista de atropellos que han sufrido los vecinos que viven en el sur de la ciudad sobre la calle Grand, entre los pasos a desnivel de la calle 42 hasta la 58, es demasido larga.
“No sabemos si son los desamparados los que están cometiendo los crímenes pero está claro que hay gente que aprovecha la situación para cometerlos”, indicó Morales.
Denuncian delitos
En un recorrido por la Grand entre los puentes de las calles 42 y 58 , Morales mostró la manera de operar: “Miras esos muchachos que andan en pareja, vuelta y vuelta por la calle en sus bicicletas con esas mochilas atrás. Ahí traen la droga. Los carros nomás se estacionan y ellos se las entregan”, señala.
Esta vecina del Sur de Los Ángeles dijo que en muchos de los carros casas estacionados sobre la Grand y la Flower, entre la 42 y 58 opera la prostitución.
“Si te fijas hay muchos vehículos que nunca los mueven. Todos tienen el mismo dueño. Y ahí es donde llevan a las prostitutas”, indica.
Kirk Edmond dice que no es posible que su nieta de cinco años se haya encontrado un condón en plena acera.
“Tuve que darle una explicación que no tenía edad aún para escuchar. Pero también es frecuente encontrarnos con toallas y ropa interior femeninas tiradas en las banquetas, no se diga jeringas”, indica.
Armando Salamanca pidió más patrullaje de la Policía día y noche. Trinidad Dumas quien desde hace 30 años vive en el sector comenta que hasta para los niños que van a la escuela es un problema porque las aceras están ocupadas por los desamparados y tienen que bajarse a caminar por la calle.
June Richard, una afroamericana que ha vivido 54 años en el barro aclara que no están en contra de los desamparados.” Pero exigimos que la Ciudad los quite de en frente de nuestras casas, y les busque un terreno donde ponerlos con todos los servicios”.
Los Ángeles también rechaza las minicasas para homeless
Hace una semana, la Ciudad removió de campamentos y pasos a desnivel en el área unas casas miniaturas construidas por Elvis Summers con fondos recolectados a través de una campaña en línea.
Aparentemente Summers ha construido 37 casitas rodantes. En las casitas apenas cabe una persona acostada. A través de el sitio de Gofundme.com/mythpla ha logrado recolectar 95,895 dólares para construir las casas miniaturas pero su meta es llegar a los 100,000 dólares.
La Opinión intentó comunicarse con Summers y envió algunas preguntas pero no obtuvo respuesta.
En un comunicado, el concejal Curren Price, a quien corresponde el área, dice que estas estructuras creadas por Summers poseen riesgos a la salud y la seguridad no sólo para los desamparados sino para los vecinos.
“Los desamparados merecen acceso a vivienda permanente, la oportunidad de obtener los tan necesarios servicios para ayudarlos a ponerse de pie y ser autosuficientes”, expone.