Piden a Romney “madurar” a la luz de su fe
“No es Romney solamente, sino la gente que está a su alrededor", afirmó la empresaria republicana Antonella Packard.
Denver (EFE).- Las enseñanzas de la iglesia mormona “deberían tener un impacto directo” en los políticos que profesan esa fe, por eso una representante hispana de ese credo sugirió al candidato republicano Mitt Romney “madurar” su postura frente a la inmigración para ganar el voto de los latinos conservadores.
“La inmigración debe resolverse en el contexto de una solución respetuosa de la dignidad humana, compasiva, que promueva la justicia y que mantenga las familias unidas. Eso es algo que respalda la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones), a la que pertenece Romney”, dijo a Efe la empresaria republicana Antonella Packard.
“Pero no es ese el mensaje sobre inmigración que escuchamos de Romney”, agregó Packard, originaria de Colombia y ahora residente en Saratoga Springs, Utah.
Packard ocupó anteriormente altos cargos en la Cámara de Comercio Hispana de Salt Lake City y estuvo asociada con el grupo Somos Republicans. Actualmente es la directora estatal de la Liga de Ciudadanos Latino Americanos Unidos (LULAC). Además, fue maestra de escuela dominical en la iglesia mormona.
Las opiniones de Romney no representan necesariamente el punto de vista ni de la organización que ahora dirige ni de la iglesia a la que esta hispana se convirtió luego de llegar a Estados Unidos y donde “me recibieron con los brazos abiertos”.
Tampoco pretende, explicó, que los latinos rechacen a Romney, sino que pidió que “se tomen el trabajo de analizar sus posturas”.
“No es Romney solamente, sino la gente que está a su alrededor. Pero Romney es lo que tenemos ahora”, sostuvo Packard, en referencia a las victorias del exgobernador de Massachusetts en las primarias republicanas que lo ubican al frente de las preferencias electorales de su partido.
“Así es la política”, expresó.
Packard siente que Romney, por ser mormón, debería haberse expresado a favor de una reforma migratoria que incluya puntos similares a los del llamado “Acuerdo Compacto de Utah”, aprobado por dirigentes comunitarios, líderes religiosos y legisladores de Utah en diciembre de 2010.
Ese documento pide que la solución al problema migratorio provenga del Gobierno federal, que el cumplimiento de las leyes migratorias se enfoque en extranjeros criminales, que las familias se mantengan unidas, que se reconozca el aporte económico de los inmigrantes, y que se les trate con dignidad, reconociendo que son parte de la sociedad.
Poco después de la firma de ese acuerdo, la iglesia mormona se expresó a favor de la iniciativa.
Por el contrario, Romney, ha manifestado que si gana en noviembre y el Congreso aprueba el proyecto Dream Act para legalizar a estudiantes indocumentados, lo vetaría.
Para Packard, la discrepancia entre las enseñanzas de la iglesia mormona sobre inmigración y las declaraciones de Romney sobre el tema deberían motivar a los votantes latinos “a analizar la calidad del carácter de Romney, y no solamente de él, sino de todos los otros candidatos”.
“La comunidad latina es muy diversa. Venimos de muchos lugares distintos. Pero ahora todos tenemos algo en común y es el poder de decidir las próximas elecciones. Debemos entender que tenemos ese poder porque votar es nuestro deber como ciudadanos”, declaró.
Packard indicó que se decidió a hablar en público y a los medios sobre la conexión entre su fe y su postura política “porque ya son muchas las personas que me preguntan sobre la postura política y migratoria de mi iglesia”.
Su meta, dijo, no es ni presentar “la postura oficial” de la iglesia mormona, ni “criticar” a Romney, sino “fomentar una conversación, un diálogo sobre los puntos de vista de un candidato que profesa tener la misma fe que yo tengo”.
Packard se define como “una mormona conservadora y proinmigrante” y confía que su experiencia religiosa, empresarial y política la ayudarán a “construir puentes” entre esos tres grupos a los que ella pertenece.
Para Packard, “Romney tiene muchas cosas buenas, pero los latinos todavía estamos esperando que cambie su postura sobre inmigración”.