Cobra fuerza debate en Houston por propuesta antiinmigrante
La propuesta, impulsada por el grupo local Stop the Magnet, busca introducir dos ordenanzas, una de las cuales obligaría a la Policía a verificar el estatus migratorio de las personas a las que detiene
Houston – Una propuesta antiinmigrante en Houston, con similitudes a la ley SB1070 aprobada en Arizona en 2010, ha generado el repudio y llamado a la acción por parte de comunidades de inmigrantes y académicos.
La propuesta, impulsada por el grupo local Stop the Magnet, busca introducir dos ordenanzas para votación en las elecciones generales de noviembre en esta ciudad, una de las cuales intenta exigir al Departamento de Policía de Houston que verifique el estatus migratorio de todas las personas a las que detiene o encarcela.
La iniciativa señala que la policía debe corroborar el estatus migratorio de esos individuos “cuando haya sospecha razonable de que la persona es un extranjero presente ilegalmente en EE.UU”, y canalizar a los indocumentados para su deportación.
Sin embargo, según Geoffrey Hoffman, Director de la Clínica de Leyes Migratorias del Centro de Leyes de la Universidad de Houston, “la focalización específica sobre los inmigrantes para ser deportados por agentes locales y estatales es contraria a la Cláusula Suprema de EE.UU, y pertenece exclusivamente al territorio federal, salvo pocas excepciones”.
Esa cláusula, explicó el académico a Efe, se refiere al Artículo VI de la Sección 2 de la Constitución, que establece la ley federal como suprema y prevalente sobre cualquier ley estatal o local que entre en conflicto con ella.
La otra propuesta de Stop the Magnet exigiría que el Gobierno de la ciudad se responsabilice por la verificación del estatus legal para trabajar en el país no sólo de sus propios empleados, sino de todos aquellos que trabajen para sus contratistas y subcontratistas.
“Yo no creo que tales ordenanzas sean aprobadas en Houston. Si se convierten en parte del debate cívico, urjo a que se lleven a cabo protestas pacíficas contra tales proposiciones, las cuales estarían basadas en motivos ilegítimos de racismo e intolerancia”, señaló el profesor Hoffman.
Agregó que “la identidad de Houston como lugar donde todas las personas de un amplio rango de antecedentes culturales y etnias prosperan es retada por (proposiciones de) ordenanzas como estas”.
El académico explicó que Houston ha sido reconocida como una de las áreas metropolitanas más étnicamente diversas del país, y citó para ello estudios del Instituto Kinder para la Investigación Urbana de la Universidad de Rice, entre otros.
La Encuesta del Area de Houston del instituto Kinder, que mide anualmente la transformación económica y demográfica de la región, revela igualmente que la cantidad de houstonianos que considera que la policía debe jugar un rol activo en identificar a los inmigrantes indocumentados decreció de 61% en 2010 a 44% en 2011.
Según la misma, 67% de los residentes de Houston apoya que “se le otorgue a inmigrantes ilegales una vía para la ciudadanía si hablan inglés y no tienen antecedentes criminales”, comparado con 59% en 2010.
Por su parte, Stop de Magnet argumenta que “todas las naciones soberanas del planeta creen fervientemente que tienen el derecho de controlar sus fronteras. ¿Por qué Estados Unidos tiene que ser diferente?”, dijo a Efe Elizabeth Theiss, líder del grupo.
Theiss enfatizó que “la falta de respeto por nuestra frontera es un ‘caos’, y el caos crea el ambiente que engendra criminalidad”.
La página de internet del grupo contiene enlaces a artículos sobre crímenes atribuidos a inmigrantes indocumentados, y sobre su supuesto impacto negativo en diferentes áreas de la sociedad.
Nelson Reyes, director del Centro de Refugiados Centroamericanos Gano Carecen en Houston, dijo a Efe que “en toda sociedad hay criminales, pero cuando apuntan a los inmigrantes como una amenaza para el país lo que están es usándolos como chivos expiatorios, criminalizando y estereotipando a esta comunidad de trabajadores”.
Reyes considera que “es importante que el gobierno federal entienda que si no se busca una solución integral a la problemática social migratoria, lo que vamos a ver es lo que sucedía cuando se pedía igualdad por los derechos afroamericanos, de las mujeres y otros grupos minoritarios que han luchado por ser parte del sistema.
“Nosotros estamos en esa etapa ahora por la defensa de nuestros derechos. Con el tiempo se va a lograr, pero ahora hay que luchar fuerte”, puntualizó.