Denuncian la venta de armas a Siria
50 países expresan su desaprobación al apoyo financiero a Siria
PARÍS, Francia (EFE).- Una cincuentena de países y organizaciones participantes en la reunión de un grupo de trabajo de los “Amigos de Siria” denunció que continúa la venta de armas al régimen de Damasco.
En un comunicado difundido al término de su encuentro en París, ese grupo expresa su “firme desaprobación de todo apoyo financiero o de otro tipo, en particular la venta de armas”, en alusión indirecta a Rusia.
La nota reafirma la necesidad de mantener las presiones contra el Gobierno de Bachar al Asad, e insta a los hombres de negocios que “sostienen financieramente la represión sangrienta” y a todos aquellos que colaboran con ese régimen a que se distancien del mismo para poder ser borrados de la lista de sancionados.
La reunión, copresidida por Francia, Marruecos y el Servicio Europeo de Acción Exterior, pide igualmente “a todos los sirios y organizaciones de la sociedad civil” que se distancien públicamente de las violaciones de los derechos humanos que puedan ser consideradas crímenes contra la humanidad.
“Las personalidades que sean objeto de sanciones y hayan demostrado su oposición a la represión podrán ver el levantamiento de las medidas restrictivas que pesan contra ellas”, indica la nota.
El grupo recordó que esas sanciones, de tipo económico y diplomático, buscan incrementar la presión contra personas e instituciones responsables de esa violencia y privar al régimen de los recursos que utiliza para llevarla a cabo.
El ministro francés de Exteriores, Alain Juppé, señaló que las reservas financieras sirias se han reducido a la mitad, y que las sanciones han “secado la renta petrolera y privado al Estado sirio de recursos preciados”.
Por ello, la cincuentena de países representados expresó su satisfacción por las medidas ya decididas por la Unión Europea, la Liga Árabe y países como Estados Unidos o Japón, y animó a todos los “Amigos de Siria” que todavía no las han aplicado a que unan sus esfuerzos para “aislar todavía más” a Damasco.
El objetivo de este grupo, que mantendrá su segunda reunión el próximo mes en Washington, es compartir la información sobre las sanciones adoptadas para reforzar su eficacia, examinar cómo mejorar su aplicación y “proponer medidas adicionales de tipo voluntario”.
La presión debe ser eficaz, aseguraron, para que el Ejecutivo sirio respete de manera integral el plan diseñado por el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, y el establecimiento de una transición política que responda a las aspiraciones de la población.