Migrantes dicen que un santo se aparece
Grupos de aspirantes a indocumentados han reportado supuestas apariciones de San Toribio, patrono de los migrantes, quienes aseguran los ha salvado de la muerte en el desierto de Altar-Yuma.
SAN LUIS RICO COLORADO, Sonora (Notimex).- Grupos de aspirantes a indocumentados han reportado supuestas apariciones de San Toribio, patrono de los migrantes, quienes aseguran los ha salvado de la muerte en el desierto de Altar-Yuma.
Sobre el tema, el obispo de Mexicali, José Isidro Guerrero Macías, exhortó a los feligreses a continuar pidiendo la intercesión de este hombre santo, que en vida era sacerdote y tenía un físico tipo estadunidense.
“Rubio, blanco, alto y de ojos azules, y al cual muchos migrantes han tenido la experiencia de ver a San Toribio, ya es una historia y una tradición”, dijo.
Refirió que iglesias de Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Chiapas y Baja California lo reconocen como el patrón de los migrantes.
En el ejido Puebla del Valle de Mexicali, el párroco Francisco Godínez construye un templo muy hermoso dedicado a ese protector, dijo, “y el obispo de San Juan de los Lagos nos prometió una reliquia”.
El dirigente de la Diócesis mexicalense que incluye a este municipio, afirmó que sobre las apariciones del Santo Toribio hay historias fascinantes.
El cura Toribio Romo González murió en Tequila, Jalisco en 1928 durante la guerra cristera en México, al ser abordado por soldados, quienes le preguntaron ¿quién vive?
“Los soldados esperaba que respondiera viva el supremo gobierno, pero les contestó viva Cristo Rey y por eso fue martirizado, porque era el castigo por responder así”, relató Guerrero Macías.
Por su parte, la encargada de la Casa del Migrante La Divina Providencia, María Vargas de Andrade, expuso que en los últimos meses varios connacionales aseguran haber visto a un migrante llamado Toribio Romo.
Explicó que el más reciente caso es de tres aspirantes a indocumentados que fueron abandonados por el “pollero” en el desierto de Altar y estaban a punto de morir por el calor, ya que la temperatura estaba por encima de los 120 grados.
“Nos dijeron completamente convencidos de que de repente llegó con ellos otro migrante, vestido normal y les dio agua y algo de alimentos y que después los guió hasta una carretera, ya que se encontraban perdidos”, relató la encargada del albergue.
Cuando estuvieron en la carretera los dejó, señalando que “pues yo hasta aquí los dejo, porque tengo que seguir mi camino”, pero no vieron nada extraño, sino les pareció una ayuda normal de una persona que se encontraba en las mismas circunstancias que ellos”, expuso.
Vargas de Andrade refirió que más tarde, miembros del Grupo Beta recibieron información de algunos conductores de que había unos migrantes en el camino, por lo que los recogieron y llevaron a los migrantes al hospicio, en cuyo vestíbulo existe una fotografía del Santo Toribio.
“Uno de ellos me preguntó, oiga ¿quién es ese señor de la foto? Es el que nos ayudó a salir del desierto. Le respondí pues mire usted, esta persona tiene muchos años que falleció y les platiqué la historia”, dijo.
Agregó que otro migrante, ahora residente de Los Ángeles, California, también estuvo en peligro de morir en el desierto y fue rescatado por un hombre llamado Toribio Romo, originario de Jalisco.
Mientras salían a la carretera, en la plática Toribio le dijo que era de Jalostotitlán, por lo que, agradecido, el connacional fue a buscarlo al regresar a México, tras varios años de trabajar en Estados Unidos.
Ese migrante intentó localizarlo en la región de Jalisco, pero nunca lo encontró, hasta que fue a una iglesia y se percató de que la fotografía del mártir estaba en la pared del templo.
Vargas de Andrade expresó que este paisano le platicó la historia recientemente, ahora que regresó a esta frontera de Baja California para intentar una nueva travesía hacia Estados Unidos.