Campañas en pausa previo a primarias definitorias
Tanto Barack Obama como Mitt Romney presentan menos actividad durante el fin de semana largo.
Washington (EFE).- La campaña electoral en Estados Unidos entró hoy en un breve paréntesis antes de las primarias del próximo martes en Texas, en las que Mitt Romney tiene todo a favor para asegurarse matemáticamente la nominación presidencial republicana.
El presidente y candidato demócrata a la reelección, Barack Obama, no tiene actos públicos este viernes y durante el fin de semana largo -el lunes es festivo en el país- participará en actividades vinculadas con el “Memorial Day”, una fecha en la que se recuerda a los militares estadounidenses caídos en combate.
Romney, el probable rival de Obama en noviembre, pasará unos días de descanso en la casa que tiene en California, un estado que celebrará sus primarias el 5 de junio.
El exgobernador de Massachusetts se preparará en California para esas primarias y para las que se realizarán el próximo martes en Texas, que repartirán 155 delegados y le pueden dar ya matemáticamente la nominación presidencial de su partido.
Según la web de análisis político RealClearPolitics, Romney tiene ahora 1,064 delegados de los 1,144 necesarios para obtener la candidatura presidencial en la convención que el Partido Republicano celebrará a finales de agosto en Tampa (Florida).
El único rival de Romney en las primarias republicanas es el congresista Ron Paul, que ya no está haciendo campaña pero sí peleando por el voto en las convenciones estatales de cara a la cita de Tampa.
Si no hay sorpresas, Romney será proclamado candidato en Tampa, pese a que durante el largo proceso de primarias republicanas se ha constatado que no cuenta con un respaldo amplio entre los sectores más conservadores.
Las últimas encuestas muestran un empate en intención de voto entre Obama y Romney para las elecciones presidenciales.
No obstante, Obama tiene una leve ventaja sobre Romney en los estados de Florida, Ohio y Virginia, que pueden ser decisivos en noviembre, según un sondeo de la cadena NBC divulgado el jueves.
Otra encuesta del diario The Washington Post y la cadena ABC dada a conocer hoy muestra que los votantes están divididos entre Obama y Romney cuando se trata de decidir quién velará mejor por sus intereses económicos.
El sondeo revela que un 46% de los entrevistados cree que un segundo mandato de Obama será mejor para sus intereses económicos y los de su familia, mientras un 43% se decanta por Romney.
A la pregunta de quién será más beneficioso para los intereses económicos de la clase media un 51% respondió que Obama, frente a un 42% que eligió a Romney.
Sin embargo, los votantes blancos de clase media golpeados por el desempleo y que están luchando por mantener su posición financiera prefieren a Romney (58%) muy por delante de Obama (32%).
Romney también saca ventaja a Obama cuando se trata de quién favorecería más a los estadounidenses adinerados y a las instituciones financieras.
La encuesta fue realizada por teléfono entre el 17 y el 20 de mayo con entrevistas a 1,004 adultos y tiene un margen de error de 3.5%.
El empate en intención de voto se ha trasladado a la recaudación de fondos y Romney consiguió en abril situarse casi a la altura de su rival, con $40.1 millones frente a los $43.6 millones de Obama, según datos de ambas campañas publicados el pasado lunes.
Tras participar en Chicago en la Cumbre de la OTAN, en la que refrendó su estrategia para poner fin a la guerra en Afganistán en 2014, Obama culminó la semana con varios actos electorales en Iowa, donde defendió su política energética.
En Iowa, en un breve descanso entre un discurso en una fábrica de turbinas eólicas en Newton y un mitin en Des Moines, el presidente respondió personalmente a varias preguntas de tuiteros sobre temas como las hipotecas y los préstamos estudiantiles.
Mientras, Romney dedicó los últimos días a promocionar en Washington y Filadelfia su política educativa, con la que promete cambiar la educación “tercermundista” que afecta en especial a las minorías en Estados Unidos.