Denise Quiñones lanza su primer disco
La exMiss Universo puertorriqueña también sueña con llegar a Broadway
Miami – Desde pequeña, Denise Quiñones se imaginaba cantando y bailando sobre un escenario. La mitad de ese sueño acaba de convertirse en realidad con el lanzamiento de su primer disco como cantante. Ahora espera poder concretar la otra mitad: subirse a una tarima de Broadway como parte del elenco de un musical.
“Me visualizaba algún día en tarimas, incorporando la música con el baile. Tal vez como un tipo de showman en tarimas. Desde que tengo uso de razón, siempre me visualizaba de esa manera”, dijo hoy la actriz y exMiss Universo de 31 años en una entrevista en Miami.
Y aunque asegura que recibía propuestas para grabar un disco, pasaron años hasta que por fin lo hizo.
¿Las razones? Principalmente no le gustaban las canciones que le ofrecían, dijo.
“La esencia, la música, no era lo que yo quería interpretar… Ahora es que finalmente se me da la oportunidad de hacer un proyecto, un disco como yo realmente lo quería y lo visualizaba desde hace tantos años”, manifestó Quiñones, tras revelar que le gustan las canciones con letras inteligentes, creativas y profundas.
El disco “Ruidos y silencios” de la exMiss Universo puertorriqueña se estrenó en la tienda virtual de música iTunes a finales de mayo, se lanzó como CD en República Dominicana y en agosto llega a Puerto Rico. Sus aspiraciones incluyen llevarlo también a todo Estados Unidos y Latinoamérica.
Con 11 canciones en español y un estilo principalmente romántico, fue producido por el cantautor dominicano Pavel Núñez para el sello Pavel Corredor Music Group.
¿Y el sueño del musical?
Hace dos años Quiñones participó en una producción de “Chicago” en Santo Domingo, experiencia que disfrutó a más no poder y que la ha dejado con ganas de más.
“Me fascinó unir las tres áreas que me gustan tanto: el canto, el baile y la actuación”, recordó la joven que pasaba desapercibida en un restaurante ubicado en la terraza de un moderno edificio del centro de esta ciudad.
“Esa sí sería una meta que me gustaría, hacer el musical de ‘Chicago’ en Broadway”, confesó sonriente, ataviada en un pantalón violeta que delineaba sus largas y delgadas piernas y una camisola sugerente entre amarillo pálido y dorada.
Y aunque Quiñones, quien fue invitada del cantautor colombiano Juanes en un concierto privado en Puerto Rico, está concentrada fundamentalmente en la promoción de su disco, también tiene tiempo para participar de proyectos que la ponen en contacto con la comunidad latina de Estados Unidos.
Así, será la intérprete de una canción que componga Núñez con la historia ganadora del concurso “Un canto al cambio” que promueve Pine-Sol. Los hispanos que quieran participar deben presentar un vídeo de 90 segundos o escribir un artículo de 280 palabras con una historia que haya cambiado su vida.
Esa historia será la base de la canción, y el ganador podrá asistir en septiembre a un festival de Los Angeles donde Quiñones la presentará.
Quiñones, quien por ahora no ha contemplado la posibilidad de cantar en inglés, mantuvo hace unos años una relación sentimental con René Pérez de Calle 13, quien dijo la ayudó a conocer géneros musicales como la nueva trova.
“En el tiempo que estuve con él tuve la oportunidad de conocer otros tipos de música, de adentrarme, de ver otro tipo de ambiente… fue como un eslabón más en mi vida de aprendizaje musical”, expresó la cantante y actriz.
Aseguró, sin embargo, que Pérez no influyó en su decisión de ser cantante profesional.
Quiñones estudió cine y teatro en Nueva York, donde fue nominada a un premio ACE por su actuación en una puesta en español de “Ana en el trópico”. Y aunque los últimos años ha aparecido en varias obras teatrales, series de televisión y películas, afirma que su carrera recién empieza.
“Es que es un sueño que nunca se acaba. Tanto en la actuación como en la música, siempre hay algo más que lograr, algo más que aprender, algo más en que desarrollarte. En términos de ese sueño de carrera, estoy empezando, en completa evolución, en mi principio. Me falta mucho”.