“Los policías (de Puerto Rico) mataron a mi hijo”
Madre corrobora las denuncias de abusos y uso excesivo de la fuerza por parte de la uniformada boricua
Washington – Los policías de Puerto Rico “se convierten en cómplices, callan y mienten” para encubrir a sus colegas que cometen abusos, afirmó hoy Ruth Jiménez, cuyo hijo de 28 años murió en custodia policial.
“Han pasado cuatro años y ocho meses desde que los policías mataron a mi hijo”, afirmó Jiménez en una conferencia en el Edificio Nacional de la Prensa en Washington a la cual concurrió invitada por la Unión de Libertades Civiles (ACLU, por su sigla en inglés).
La ACLU presentó hoy un informe de 180 páginas titulado “La isla de la impunidad- la fuerza policial de Puerto Rico fuera de la ley”, que documenta los supuestos abusos y carencias del segundo departamento policial más grande de EE.UU., que cuenta con más de 17,000 policías.
Según la investigación de ACLU y los informes forenses, el hijo de Jiménez, Jorge Polaco, llegó muerto a un hospital con siete heridas de bala en la espalda y una en su hombro derecho.
“Nunca he recibido información oficial, de la Policía, sobre qué ocurrió con mi hijo, y lo que he averiguado lo he averiguado con mi propia investigación”, dijo Jiménez.
“Busco que se haga justicia”, añadió la mujer quien indicó que la Policía de Puerto Rico protege a uno de sus agentes que, según ella, fue el que disparó los siete balazos que presentaba en su espalda el cuerpo de su hijo.
“Es hijo de un oficial de alto rango en la Policía de Puerto Rico y lo encubren para ocultar la verdad que ellos saben y yo no sé”, añadió.
Jiménez afirmó que ese agente fue enviado a Estados Unidos cuatro días después del incidente, en octubre de 2007, en el cual murió su hijo, y “ahora trabaja, como agente con un historial completamente limpio, en la frontera de EE.UU. con México”.
“En Puerto Rico nadie investiga algo si se trata del Gobierno”, denunció Jiménez.