Indígenas bolivianos secuestran a ingenieros canadienses
Determinaron tomar la acción para exigir la liberación de un dirigente suyo detenido por tortura
LA PAZ – Indígenas del oeste andino de Bolivia secuestraron a dos ingenieros de una filial de la firma minera canadiense South American Silver para exigir la liberación de un dirigente suyo detenido por tortura, secuestro y otros delitos, informaron hoy la empresa y el Gobierno.
Los habitantes de Malku Khota, pueblo situado 350 kilómetros al sur de La Paz, en el departamento de Potosí, fronterizo con Argentina y Chile, tomaron ayer como rehenes a los ingenieros Fernando Fernández y Agustín Cárdenas, según la empresa.
“Lo que han hecho es un secuestro, es un delito, es un crimen”, aseguró hoy el ministro de Gobierno, Carlos Romero, al canal de televisión local Cadena A.
Agregó Romero que el dirigente que los indígenas piden liberar, Cancio Rojas, “está detenido por una orden de la autoridad judicial competente, porque se lo acusa de secuestro, tortura y otros delitos”.
La Compañía Minera Malku Khota, subsidiaria a la canadiense, dijo en un comunicado que sus empleados están en “serio riesgo, ante la agresividad e intolerancia con que actúan estos grupos”.
Una fuente vinculada a la empresa declaró a Efe que un juez de Potosí decidió anoche cambiar el apresamiento de Rojas por arresto domiciliario y pago de una fianza.
Parte de los grupos indígenas de la zona están movilizados desde abril para expulsar a la filial de la firma canadiense porque ellos han formado una cooperativa para explotar oro.
La minera realiza exploraciones en esa región para evaluar su potencial en plata e indio, que son los minerales mayoritarios, aunque también hay oro en porcentajes reducidos.
La empresa dijo además que su proyecto minero cuenta con el apoyo mayoritario de cinco “ayllus” (clanes indígenas) de la región y solo uno se opone a sus operaciones.
Los contrarios al proyecto, encabezados por Cancio Rojas, han protagonizado incidentes violentos desde abril, incluidas agresiones a otros indígenas y el secuestro por varios días de agentes policiales