ICE reduce unidad en Phoenix
La unidad era efectiva para ayudar a la policía local a combatir coyotes que usaban el área como punto intermedio para transportar inmigrantes a otras partes de la nación.
PHOENIX, Arizona (AP).- La Oficina de Inmigración y Aduanas redujo el personal de una unidad en Phoenix que responde llamados de agencias policiales locales para identificar y deportar a inmigrantes no autorizados a estar en el país.
La medida tiene lugar en momentos en que las autoridades locales se aprestan a empezar a hacer cumplir la ley de Arizona para combatir a esos inmigrantes.
Algunos partidarios de la lucha contra la inmigración no autorizada se preocupan de que la reducción de la unidad dificulte la capacidad de la agencia para responder a la policía local, reporta el periódico Arizona Republic.
El representante estatal republicano John Kavanagh, uno de los principales partidarios de la ley de Arizona, es uno de los que avizoran posibles problemas.
Kavanagh afirmó que se preocupa de “que el gobierno de (Barack) Obama haya ordenado a la agencia que, aunque tenga el personal, no responda a todo supuesto inmigrante ilegal a menos que el individuo tenga antecedentes penales graves o haya sido deportado antes. Ese es el problema número uno”.
En junio, la agencia federal empezó a reasignar miembros de la unidad de la Agencia de Respuesta Policial (LEAR) para ayudar a combatir en otros estados a la inmigración no autorizada.
El contrabando humano en la zona de Phoenix ha disminuido y la agencia ha estado modificando sus prioridades para concentrarse en deportar a los inmigrantes más peligrosos que carecen de permiso de residencia.
Amber Cargile, portavoz de la agencia, dijo que las prioridades incluyen los delincuentes con antecedentes penales y los inmigrantes no autorizados que hayan sido deportados y que hayan vuelto a ingresar al país.
El sargento de policía de Phoenix, Tommy Thompson, dijo que su departamento todavía no ha notado cambios en la capacidad o disposición de la agencia para responder.
En junio, la Corte Suprema federal refrendó la disposición en la ley de Arizona que permite a la policía tratar de determinar la situación inmigratoria de las personas que detiene o arresta, si es que tiene una duda razonable de que puedan estar en el país sin autorización.
Según el fallo, la policía podría violar los derechos constitucionales de una persona si el sospechoso es detenido durante más tiempo del que habría demorado un interrogatorio regular. La ley podría entrar en vigencia después del 20 de julio, una vez que tribunales de menor instancia suspendan una orden judicial que ha regido desde julio del 2000.
Phoenix es todavía la única ciudad con una unidad LEAR. Creada en el 2006, incluía un supervisor y de ocho a diez agentes preparados para responder en cualquier momento, dijo Phil Crawford, quien en ese entonces era director de operaciones de deportación y remoción.
En esa época, la agencia estaba inundada con pedidos de ayuda del estado, la policía de Phoenix y otras agencias locales en el condado Maricopa. Esas agencias encontraban frecuentemente vehículos de contrabando atestados de inmigrantes no autorizados para vivir en Estados Unidos o casas utilizados por los coyotes para ocultar a los inmigrantes.
Crawford afirmó que la unidad era efectiva para ayudar a la policía local a combatir las organizaciones de coyotes que usaban el área de Phoenix como punto intermedio para transportar los inmigrantes a otras partes de la nación.