AMLO reúne pruebas para anular elección
'O se acepta la imposición, o se invalida la elección', dice un abogado de izquierdas
MÉXICO, D.F.- El candidato presidencial del izquierdista Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, pidió a los mexicanos entregar pruebas de compra de votos, coacción o lavado de dinero a través de 142 mesas que serán abiertas en el mismo número de plazas de todo el país, principalmente en las capitales de los 32 estados.
El político busca invalidar la elección por considerar que existen violaciones a la Constitución que vigila las libertades individuales: presuntamente su rival en las urnas, el priista Enrique Peña Nieto, compró cinco millones de conciencias con dinero ilícito, manipulación de encuestas, desvío de recursos estatales y una “maquinaria electoral” pagada por encima de los topes de gastos de campaña.
“La presidencia no se compra y el destino de México no tiene precio”, dijo ayer al arrancar su Plan Nacional en Defensa de la Democracia y de la Dignidad de México.
López Obrador quiere que la ciudadanía abone denuncias para canalizar al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que tiene hasta el próximo 6 septiembre para dar el fallo sobre los comicios.
La recopilación de pruebas será en mesas especiales que se instalarán en sitios todavía por definirse, pero con fechas concretas: el domingo 29 de julio y el domingo 5 de agosto.
López Obrador calcula que las evidencias llegarán en masa, un colectivo de largas filas que incluirá a “arrepentidos priístas” que, según describió, están “horrorizados” y ya comenzaron entregar al Movimiento Progresista tarjetas, testimonios, videos y fotos.
Para llamar la atención de la gente, su equipo cercano -encabezado por su coordinador de prensa César Yáñez- irá “casa por casa” en una campaña de difusión sobre “el nivel de corrupción” que se alcanza en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y sus aliados del Partido Verde Ecologista de México.
“Se debe generar conciencia en que, si se permite la imposición, habrá más corrupción en el país”, advirtió.
Los izquierdistas pregonan que echarán mano a todos los recursos que consideran útiles para “defender la democracia”.
A la par de la recopilación de indicios de irregularidades organizarán tertulias con concursos de cantautores cuyas letras se inspiren en quienes votaron por Enrique Peña, los “billetes” de la elección, las encuestas, los medios de comunicación y los fundamentos jurídicos para la invalidez de la elección.
Los contertulios serán escritores como Elena Poniatowska y Paco Ignacio Taibo II; también productores de telenovelas como Epigmenio Ibarra; y fieles seguidores de la campaña de López Obrador que animarán documentales, murales, teatro, danza y poesía relacionados con la elección.
Lejos de 2006 quedaron las acciones radicales como toma de calles y plantones, aclaró la estrategia que cancela protestas, mientras el TEPJF continúa el estudio de las impugnaciones presentadas por los partidos políticos inconformes.
“Quisieran nuestros adversarios que cayéramos en la trampa de la provocación, de la violencia”, especuló López Obrador. “Se van a quedar con las ganas”
La táctica de izquierda anunciada ayer se tomó con ironía entre sus rivales. “Ante la ausencia de pruebas, lo que les queda es hacer una fiesta, un show”, dijo en televisión Jesús Murillo, el coordinador de asuntos jurídicos de Enrique Peña y exgobernador de Hidalgo, quien aseguró que prepara una “contraofensiva seria” para abonar pruebas a su favor.
Los resultados del Instituto Federal Electoral (IFE), pendientes del fallo judicial, ubican a López Obrador -exjefe de Gobierno del Distrito Federal (2000-2006)- en segundo lugar de las elecciones del pasado 1 de julio, con tres millones de votos menos que Peña Nieto; la oposición denuncia que se “compraron” cinco millones.
“La pasada elección presidencial colocó al pueblo de México ante una encrucijada”, definió el abogado de izquierdas Jaime Cárdenas. “O se acepta la imposición, o se invalida la elección”, destacó.