Betty White sigue infatigable
La popular actriz continúa con una carrera en el cine y la televisión a pesar de sus 90 años.
Qué se puede decir a estas alturas de Betty White.
Tras más de 73 años en la pequeña pantalla, 20 nominaciones al premio Emmy (ha ganado siete), intervenciones en clásicos de la televisión como The Mary Tyler Moore Show o The Golden Girls, apariciones en películas como Advise and Consent (1962), Bringing Down the House (2003) y The Proposal (2009), y referente socio-cultural (y humorístico) en programas como The Late Late Show, con Craig Ferguson, su imagen es reconocida por todas las generaciones de aficionados.
El estado de Illinois la vio nacer en enero de 1922 en el seno de una familia tradicional sin relación alguna con el mundo del espectáculo.
Pero en 1939 apareció por primera vez en la pequeña pantalla (aunque en un pequeño canal de Los Ángeles, donde sus padres se mudaron durante la Gran Depresión). Tras la Segunda Guerra Mundial se decantó por la radio, pero la llamada de las cámaras terminó seduciéndola. Y, como siempre se dice, el resto es historia.
Hoy se pone a la venta la edición en Blu-ray y DVD de la cinta animada Dr. Seuss’ The Lorax, en la que presta su inimitable voz, ocasión que ¡holaLA! aprovechó para charlar con ella.
White -que se casó tres veces, la última con el presentador de televisión Allen Ludden, en un matrimonio que duró casi 18 años, hasta la muerte de este-, ha trabajado en varias producciones animadas con anterioridad —The Simpsons, The Wild Thornberrys, Ponyo—, algo que le gusta hacer no porque sea una seguidora del género -“no un fan muy específico. Pero sí he disfrutado de muchas [películas]”, aseguró-, sino porque es fácil.
“Primero, no hay que ponerse las pestañas postizas. Una solo lee su diálogo…”, bromeó. “Es divertido. Pero es un estilo [de actuación] distinto. No hay un referente visual. Hay que usa solo la voz. Pero hay que hacerlo bien, porque una no puede usar todas las herramientas que emplea en el otro tipo de actuación. Pero desde un punto de vista físico, sí, es mucho más fácil”.
“Es increíble cómo una pone la voz, la envían al otro lado del mundo y los [animadores] imitan en sus dibujos a Betty White, sus expresiones y movimientos. Aún no sé cómo lo hacen…”, añadió.
A pesar de su longeva carrera en cine y televisión, Betty White reconoció que nunca conoció personalmente a Walt Disney, máximo exponente del cine animado. “Sí soy una admiradora tremenda de él. Y a lo largo de los años he trabajado para [su] compañía, mucho, pero nunca tuve el privilegio de conocerlo”, expresó.
Hoy, Betty White sigue al pie del cañón, en un negocio, el de la televisión, que, comparado con décadas previas, “es más duro. Porque cuando empecé, la televisión también acababa de empezar”, recordó. “Era un milagro en la sala de estar de los hogares. Todo era una sorpresa. Ahora, las audiencias han escuchados todas las bromas, han visto todos los argumentos, saben a dónde va todo. Es muy difícil sorprender al público. Pero es un privilegio el seguir trabajando. No es algo que me lo tome a la ligera”.
Como muestra de esa intensa actividad, esta misma semana, “regresamos a Hot in Cleveland y [pronto] también a Off Their Rockers. Este otoño voy a volver a tener dos series en televisión”, detalló en referencia a la comedia que emite TV Land y al programa de bromas de NBC, respectivamente.
Pero su labor como actriz nunca le ha impedido seguir siendo una ferviente defensora de los derechos de los animales, una pasión que, afirmó, empezó en “la barriga de mi madre [risas]. Mi padre y mi madre estaban locos por los animales y, gracias a Dios, me contagiaron esa pasión”, dijo.
“La otra noche fui al Zoo [de Los Ángeles] donde una familia ganó una subasta en la que el premio era pasear conmigo por el zoo. Es algo que hago cada año. Estuvimos en el área de descanso de los tigres… Hay uno que tomé en mis brazos hace solo unos meses y ahora es inmenso. Y me reconoció. Vino a la reja y pude tocarle la nariz [risas]”.
Según la actriz, “mucha gente no sabe ni que tenemos un zoo [en LA] maravilloso. Llevo trabajando con ellos durante más de 50 años. Tenemos una exhibición maravillosa de gorilas y chimpancés… Animo a todo el mundo a venir al zoo y pasear. Es una experiencia maravillosa”, expresó.
Los Ángeles es la ciudad que siempre la ha visto triunfar y, desde que creció aquí en los años 30, ha cambiado mucho. Hoy “es una ciudad muchísimo más sofisticada. Solía ser un pueblo grande… y por eso muchos neoyorquinos piensan aún eso”, aseveró. “Pero ahora es una ciudad inmensa y quizás algo abrumadora. Pero es mi hogar. Y no importa a dónde vaya, siempre regreso aquí porque este es el lugar que amo”.
Hoy, cuando gente de todas las edades la reconocen -gracias a su mayor éxito junto a las ya fallecidas Rue McClanahan, Bea Arthur y Estelle Getty en The Golden Girls, que se emitió desde 1985 hasta 1992-, White siempre reacciona satisfecha. “Oh, Dios mío. Es un honor. Y lo aprecio muchísimo”, expresó. “Es un privilegio seguir trabajando a esta edad en la industria que adoro. Muchos me preguntan si no es hora de retirarme. Y yo les digo por qué debería, si sigo pasándomelo tan bien”.