Romney investiga compras de votantes y a qué iglesia asisten
La campaña del republicano Romney ha contratado servicios de minería de datos para detectar a potenciales donantes.
WASHINGTON (AP) – El éxito de Mitt Romney para reunir cientos de millones de dólares en la campaña presidencial más cara hasta el momento, puede deberse en parte a un proyecto secreto de minería de datos que proporciona información personal de los estadounidenses, incluyendo su historial de compras y asistencia a la iglesia, para identificar nuevos y probables donantes adinerados, según The Associated Press.
Para el proyecto de minería de datos, el candidato republicano empleó en silencio por lo menos desde junio a una firma de análisis poco conocida, pero exitosa que anteriormente desempeñaba el trabajo de comercialización de un trabajador relacionado con Bain & Co., la firma de consultoría de gestión que Romney dirigió.
La cabeza de Buxton Co. de Fort Worth, Texas, el presidente ejecutivo Tom Buxton, confirmó a la AP los esfuerzos de su compañía para ayudar a Romney a identificar a ricos y donantes republicanos potenciales en el país.
La campaña de Romney se negó a hablar sobre su trabajo con Buxton o el éxito global del proyecto.
No existen registros de los pagos a Buxton de la campaña de Romney, el Comité Nacional Republicano o un comité de recaudación conjunta. Bajo la ley federal, las empresas no pueden utilizar dinero o recursos corporativos, tales como el análisis de datos de propiedad, en contribuciones en especie en campañas.
Buxton afirmó que trabaja para la campaña de Romney porque quiere “estar en el equipo ganador.”
Además de Buxton, el proyecto de minería de datos fue descrito a la AP por un recaudador de fondos de Romney, que habló bajo anonimato porque teme hacer frente a repercusiones de procesos internos de la campaña.
Las empresas utilizan este tipo de análisis para responder a preguntas clave de sus clientes, tales como dónde construir una tienda o dónde enviar folletos para promocionar un nuevo producto. El análisis no trae directamente contribuciones a la campaña de Romney, pero genera el equivalente de oportunidades de ventas.
Washington (EFE).- El presidente de EEUU Barack Obama sigue aventajando a Mitt Romney como el candidato más simpático, pero una encuesta de Gallup divulgada hoy muestra que el republicano atrae más confianza por su propuesta económica.
Cuando faltan menos de tres meses para la elección presidencial, los encuestadores encontraron que para el 54 % de sus entrevistados Obama es más “agradable, simpático” que Romney, que solo atrae la simpatía del 31 % de los encuestados.
Pero si se trata de la economía, el 52 % cree que Romney está más capacitado para manejar la economía de Estados Unidos, una tarea para la cual sólo el 31 % de los encuestados confía en Obama.
Asimismo, Obama obtuvo porcentajes más altos de respaldo cuando se preguntó a los encuestados cuál de los dos está más capacitado para el manejo de las relaciones exteriores, la economía, el programa de subsidios médicos para ancianos, los impuestos, y el cuidado de la salud.
Romney, cuya candidatura se hará oficial la semana próxima durante la Convención Nacional del Partido Republicano, aventaja a Obama en dos categorías- la economía y el manejo del déficit en el presupuesto del gobierno federal.
La encuesta, realizada para el diario USA Today entre el 20 y el 22 de agosto consultó las opiniones de 1,033 adultos en los 50 estados y el Distrito de Columbia, y tienen un margen de error de menos o más 4 puntos porcentuales.
“En términos generales los datos de la encuesta brindan un panorama claro de la estructura en esta contienda presidencial”, anotaron los editores de Gallup.
“La mayor vulnerabilidad del presidente Obama aparece en la situación económica, lo cual no es sorprendente dado que el índice de desempleo permanece por encima del 8 % y tomando en cuenta el bajo nivel de confianza de los estadounidenses acerca de la economía”, añadieron.
“Al mismo tiempo Obama mantiene mucha fuerza en las opiniones positivas de los estadounidenses acerca de su imagen y sus características personales, y su posición sobre varios asuntos no económicos”, indicó Gallup.