Emergencia por inundación
'Isaac' provoca dos muertos y 50,000 evacuados en los estados de Misisipi y Luisiana.
MIAMI, Florida (EFE).- “Isaac” ha provocado la muerte de dos personas y sigue azotando los estados de Luisiana, donde ayer casi la mitad de las viviendas y negocios estaban sin luz, y Misisipi, donde una presa amenaza con romperse, lo que ha obligado a ordenar la evacuación de unas 50,000 personas en ambos estados.
Aunque esta tormenta tropical se debilita progresivamente y podría convertirse en las próximas horas en una depresión tropical, su lento desplazamiento está causando estragos en Luisiana, un estado que recorre hacia el norte y que previsiblemente abandonará hoy, cuando se adentre en territorio de Arkansas.
Cerca de un millón de hogares se han quedado sin luz en los estados de Arkansas, Misisipi, Alabama y, principalmente, Luisiana, que hace siete años lidiaba con el devastador paso del huracán “Katrina”, que dejó más de 1,800 muertos.
En Misisipi, una persona murió ayer al caer un árbol sobre el vehículo en el que viajaba, según indicó en una rueda de prensa el alcalde de Nueva Orleáns, Mitch Landrieu, quien puso este caso como ejemplo de lo que puede ocurrir si no se mantiene “la máxima precaución”.
Previamente, en Vermilion (Luisiana) murió un hombre de 36 años al caer desde un árbol al que se había subido para ayudar a otra gente a mover un vehículo, según confirmó el alguacil de ese distrito, Mike Couvillon, en un comunicado.
Al azote de las constantes lluvias se ha sumado la amenaza de que la presa del lago Tangipahoa, en el sur de Misisipi, se quiebre a causa de los daños sufridos por esas lluvias.
Ello ha obligado a ordenar la evacuación inmediata, como medida de precaución, de unas 50,000 personas en los alrededores del río Tangipahoa, que recorre hacia el sur parte de Misisipi y del este de Luisiana.
El gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, explicó en una conferencia de prensa que las autoridades de Misisipi están estudiando cómo liberar el agua acumulada en la presa de una forma controlada.
Si se hace así “no esperamos que afecte a Luisiana”, pero si se rompe por sí misma “el agua tardaría 90 minutos en llegar a Kentwood (Luisiana)”, alertó Jindal.
Según el Servicio Nacional de Meteorología, si la presa se rompe el nivel del río a la altura de Kentwood podría alcanzar entre cuatro y seis metros.
También se han ordenado evacuaciones en varios barrios en las inmediaciones del lago Ponchartrain (Luisiana), según detalló Jindal, quien señaló que por el momento hay unas 7,000 personas en refugios en todo el estado, aunque se espera que esa cifra aumente a medida que pasen las horas.
Unas 900,000 viviendas de ese estado están sin luz, lo que supone cerca del 47 por ciento del total, según la Oficina del Gobernador de Seguridad Interna y Preparación de Emergencias.
El presidente Barack Obama, firmó anoche una declaración de “desastre” para Luisiana y Misisipi, lo que les permitirá gestionar ayudas federales “para complementar los esfuerzos de recuperación estatales y locales en el área impactada por ‘Isaac’ desde el 26 de agosto de 2012”.
En Nueva Orleáns (Luisiana), donde se han acumulado hasta 25 centímetros de agua de lluvia, se han iniciado las tareas de limpieza y arreglo de desperfectos en sus calles, donde al menos 149,000 viviendas permanecen sin electricidad, según anunció hoy su alcalde.
En una conferencia de prensa, Landrieu les instó a que recurran “al sentido común”, ya que hay muchos árboles y postes eléctricos caídos, así como señales de tráfico y semáforos. “Manténgase fuera de las carreteras en la medida de lo posible”, añadió.
“Afortunadamente parece que ha pasado lo peor, pero algunos de nuestros vecinos están siendo golpeados muy, muy fuerte. Nuestras esperanzas y rezos están con ellos”, dijo el alcalde, quien por el momento mantiene el toque de queda por la noche para evitar saqueos en viviendas vacías y negocios cerrados.
Desde el azote de “Katrina”, se han invertido unos 10,000 millones de dólares en un sistema de diques para esa ciudad que “ha funcionado correctamente”, dijo, pero los principales problemas siguen siendo las inundaciones y la caída del tendido eléctrico.