Un anacronismo electoral
El sistema de Colegio Electoral no pertenece a una democrciaa moderna
La cerrada elección presidencial entre el presidente Obama y el exgobernador Mitt Romney origina especulaciones de todo tipo. Una de ellas es la posibilidad de que el proximo presidente haya ganado en el Colegio Electoral y perdido en el conteo de votos.
Eso es lo que ocurrió en el 2000 con la elección de George W. Bush. El hecho de hoy que exista una posibilidad de que esto pueda repetirse refleja un anacrónismo en una nación que se dice ser un ejemplo de la democracia.
El Colegio Electoral es una institución de otro siglo. Pertenece al tiempo de los Padres de la Patria, cuando se descon fiaba de la sabiduría del voto popular, por eso establecieron una elección indirecta de representantes de cada estado. Cada delegacion tiene un número de representantes igual al de sus legisladores federales que estan a cargo de designar al Presidente.
Este sistema también fue creado para dar más poder a los estados más pequeños. Más de dos siglos después, el poder de estos estados ha crecido con los cambios demográficos de una manera tan desproporcionada que perjudica el principio básico de “una persona, un voto”.
Los sistemas políticos han evolucionado a lo largo del tiempo, cambiando las victorias de primeras minorías (como en México) por una segunda vuelta y la elección indirecta por la directa. Excepto en Estados Unidos.
En nuestro país un cambio de este tipo no es fácil, requiere una enmienda constitucional con un consenso de una mayoria de 2/3 en el Congreso y la aprobación de 3/4 de las legislaturas. Los estados que se benefician del sistema actual y que reciben una desproporcionada atenciónn por parte de las campañas presidenciales no aceptarán el cambio. No obstante, hay ocho estados (con 132 votos electorales), incluyendo California, con leyes que dan su respaldo a quien gane el voto popular.
El ganador de la elección será el candidato que obtenga los 270 votos electorales, esperamos por el bien de nuestra democracia que sea el mismo que reciba la mayor cantidad de votos.