Santos aspira a paz en 2013
El presidente de Colombia lo deseó en su saludo de Año Nuevo
BOGOTÁ, Colombia (EFE). El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, deseó en su saludo de Año Nuevo que 2013 “sea realmente el año de la paz” y que ésta multiplique la “prosperidad” en el país.
“Ojalá que este año que comienza sea realmente el año de la paz, una paz que multiplique la prosperidad que estamos construyendo”, dijo el Presidente en una alocución transmitida ayer en todos los medios de comunicación.
El Gobierno de Santos dedicó los primeros meses del año a establecer unas conversaciones exploratorias con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para buscar la forma de ponerle fin al conflicto armado que se ha prolongado durante medio siglo.
En agosto acordaron una hoja de ruta que pusieron en marcha a mediados de octubre en Oslo y que ha seguido en los dos primeros ciclos de conversaciones en La Habana, sede permanente del diálogo, que para el Presidente debe concluir con un acuerdo final en noviembre de 2013.
El mandatario grabó su saludo de Año Nuevo en la isla caribeña de San Andrés, donde ayer entregó cuatro mil tabletas a los niños y anunció ayudas en marcha y nuevas medidas que promueven el empleo en el remoto archipiélago afectado por el reciente fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya sobre el litigio de Colombia con Nicaragua.
Este dictámen confirmó la soberanía colombiana sobre siete cayos pero le restó, a favor de Nicaragua, más de 70 mil kilómetros cuadrados a un de Marzo en el que tradicionalmente habían pescado los habitantes del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
“A propósito del fallo, reitero que este no se aplicará hasta tanto no estén resueltos y garantizados nuestros derechos, por ejemplo, los de los pescadores raizales de San Andrés como los que me honro de tener a mi lado”, dijo en alusión a sus acompañantes del grupo étnico local.
En su discurso, Santos desgranó los logros de su Gobierno y destacó que la tasa de desempleo lleva cuatro meses seguidos por debajo del 10 %, aunque reconoció que todavía hay un desafío en lo referente al trabajo informal.