Alerta entre grupos de defensa de migrantes
La designación de un policía al frente del INM provoca dudas en México
MÉXICO, D.F.- Organizaciones defensoras de los derechos humanos de inmigrantes en México se encuentran “en alerta amarilla” ante la llegada del policía de carrera Ardelio Vargas al Instituto Nacional de Migración (INM) que interpretan como una señal de que el gobierno de Enrique Peña Nieto buscará cerrar “por la fuerza” el cruce y movilización de indocumentados.
“El presidente hizo todo lo contrario de lo que le recomendamos”, señaló el sacerdote Alejandro Solalinde, quien recientemente recibió el Premio Nacional de Derechos Humanos por su labor a favor del respeto de las garantías individuales de los centroamericanos que cruzan sin papeles el país.
“Personalmente expliqué hace tres días al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, la importancia de separar el aspecto administrativo del Instituto y el tema de Seguridad”, agregó el cura fundador del alberque Nuestros Hermanos en el Camino en Ixtepec, Oaxaca, quien de manea personal ha denunciado secuestros, robos, maltratos e intimidaciones contra la comunidad.
“Es un error: se le fue la mano”, dijo con la experiencia que le dio documentar la corrupción de agentes de las policías Federal, Estatal y Municipal que se aliaron al crimen organizado para lucrar con la indefensión.
Desde el sureste, Rubén Figueroa, encargado del alberque “La 72” en Tenosique, Tabasco -una de las regiones más vulnerables para los “sinpapeles” por la presencia de delincuentes Zetas- interpretó el nombramiento de Vargas como el preámbulo de una política en la frontera sur similar a la del norte, pero con un cuerpo de seguridad más agresivo.
“Si envían agentes a la región sería un error mortal”, se adelanta. “Sería poner a los centroamericanos frente a los peores peligros”, entre ellos, polleros sin escrúpulos que utilizarían los cruces más osados: pantanos y selvas con animales salvajes que abundan por la región limítrofe con Guatemala.
El futuro de la política de la inmigración en México a corto plazo coincidirá con la discusión de la Reforma Migratoria en Estados Unidos en la que se tendrá un espejo bifocal. “¿Con qué moral pediríamos un buen trato a los mexicanos en la Unión Americana si damos un ejemplo represivo aquí”, advierte Figueroa.
Más allá de especulaciones, Fernando Bolaños, quien estuvo a cargo de la oficina de Derechos Humanos del Instituto Nacional de Migración (INM), considera el tema de la migración es un tema de prioridad nacional, cuya agenda constantemente debe ser revisada, supervisada, reeditada y corregida como política pública.
“El perfil del nuevo comisionado también puede ser interpretado como un complemento: la migración es un tema que implica a la seguridad”.