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RÍO DE JANEIRO, Brasil (EFE).— Los brasileños Gremio y Fluminense empataron ayer 0-0 en Porto Alegre y dejaron el Grupo 8 de la Libertadores totalmente abierto, con la posibilidad de que los cuatro equipos pasen a octavos de final.

El empate dejó al Fluminense como líder con 8 puntos, seguido del Gremio con 7, el Huachipato chileno con 7 y el Caracas con 6, todos ellos con posibilidad de clasificarse en la última jornada.

El duelo brasileño fue un partido con pocas ocasiones, en el que se vio un Fluminense muy defensivo en la primera parte, cuando controló a un Gremio voluntarioso pero con pocas variantes.

La expulsión de Cris al filo del descanso cambió el partido, permitió al Fluminense igualar las fuerzas, pero la falta de tino y la buena actuación de los porteros, en especial del mundialista Dida, evitaron el gol.

En una primera parte de escaso futbol, el Gremio llevó la voz cantante, aunque con poca profundidad, mientras el Fluminense, plagado de bajas, se dedicó a cuidarse las espaldas, contener a su contrincante y dejar correr el tiempo.

Si bien la pelota casi siempre estaba en poder del equipo local, los hombres dirigidos por Vanderlei Luxemburgo carecían de fluidez para llegar con peligro, en parte debido a la baja del mundialista Elano.

En esa etapa, el Gremio solo consiguió incomodar al guardameta Diego Cavalieri en un remate de cabeza de Werley y, en la otra portería, Dida sacó las castañas del fuego en la única ocasión del Fluminense, un cabeceo picado de Gum en una jugada a balón parado.

Justo antes del descanso, el Gremio se quedó con diez jugadores por la expulsión de Cris, que recibió la tarjeta roja por una rigurosa entrada por detrás a Rafael Sobis.

Con un jugador menos, el Gremio no era capaz de mantener la posesión con la tranquilidad de la primera parte y la tarea de horadar la defensa carioca, ya complicada de por sí, adquirió dimensiones imposibles de superar.