Maduro denuncia conspiración
Dicen se dio envío a Venezuela de varios 'grupos asesinos' para tomar el poder
CARACAS, Venezuela (AP). El presidente Nicolás Maduro afirmó ayer lunes que desde Colombia se conspira contra Venezuela con el envío de “grupos asesinos” para generar violencia y tomar el poder
En su cuenta personal de Twitter, Maduro escribió que “desde Colombia se conspira contra nuestra Patria”, e indicó que como parte de ese plan conspirativo “la derecha ha coordinado nuevamente que grupos asesinos vengan a nuestra Patria”. No dio detalles.
Agregó: “Estamos enfrentando un plan de la derecha fascista con apoyo desde Colombia de grupos violentos, para asaltar el poder político, seguiremos” [sic].
El mandatario hizo los comentarios en alusión al anuncio que realizó el ministro de Relaciones Interiores, mayor general Miguel Rodríguez Torres, sobre la captura de nueve personas que integrarían dos presuntos grupos paramilitares que tendrían vinculaciones entre sí, y que estarían preparando “una misión” en Caracas que no precisó.
Rodríguez Torres dijo, en un discurso difundido por la televisora estatal, que la policía política capturó en la víspera en la población suroccidental de Coloncito del estado Táchira, próximo a la frontera con Colombia, a seis integrantes de un supuesto grupo paramilitar, vinculado a la organización colombiana “Los Rastrojos”.
Entre los detenidos, fueron identificados Elisa Cruz alias “La Comandante Fátima”, Pedro Araujo alias “El Amarillo”, Arlington Miranda alias “Aco”, José Echavez alias “Williams”, Javier Rodríguez alias “El Chingo” y Giovanni Salas alias “El Yova”.
Las autoridades apresaron en Guanare, estado Portuguesa, a tres personas, de origen colombiano, que integrarían otra supuesta banda paramilitar de un grupo delictivo que dirige el colombiano José María Barrera, alias “Chepe Barrera”, precisó.
En esa acción fueron capturados Luis Gómez López, José Guerrero Angulo y Manuel Guillermo Muñoz Ospino, según el informe.
El ministro informó que en esa operación se incautó un documento que revelaría que Barrera adquirió una finca en el estado Portuguesa.
Se señaló que en las dos operaciones las autoridades decomisaron un fusil de asalto ruso AK-47, un fusil estadounidense, una escopeta, dos granadas, varias pistolas, balas de diferentes calibres, cargadores, teléfonos móviles, libros, una caja negra de un avión, dinero en efectivo y uniformes militares con el emblema del Ejército venezolano.
Rodríguez Torres dijo, sin ofrecer mayores detalles, que los detenidos podrían tener “conexiones políticas” con la “extrema derecha venezolana”, y que “no nos extrañaría que viniesen dentro de esos planes que hemos denunciado constantemente de querer atentar contra la vida del presidente de la República o de cualquier otro dignatario del Estado venezolano”.
Tareck El Aissami, gobernador del estado centro costero de Aragua y ex ministro de Relaciones Interiores, dijo el lunes en su cuenta de Twitter que el exfuncionario estadounidense Roger Noriega, el exmandatario colombiano Alvaro Uribe, y el asesor político venezolano Juan José Rendón “son los principales responsables del plan violento que se prepara en contra del pueblo venezolano”.
El periodista oficialista y exvicepresidente, José Vicente Rangel, informó en la víspera, en un espacio que tiene en el canal privado Televen, que opositores estarían negociando la compra de 18 aviones y que los llevarían a Colombia, pero no presentó pruebas ni mayores datos.
Venezuela y Colombia enfrentaron el mes pasado un impasse luego del encuentro que tuvo el presidente colombiano Juan Manuel Santos con el líder opositor venezolano Henrique Capriles en Bogotá. Maduro se mostró la semana pasada dispuesto a reunirse con Santos para superar el impasse y anunció que Venezuela continuaría apoyando el proceso de paz colombiano.
El gobernante venezolano denunció el mes pasado que opositores estarían en Colombia presuntamente en busca de sicarios para cometer atentados y “sabotear” la economía venezolana, agobiada por el déficit fiscal y un agudo desabastecimiento de productos. La oposición venezolana, tanto como dirigentes colombianos, han calificado de absurdos tales señalamientos.