Comparativa: MINI John Cooper Works vs Fiat 500 Abarth
En esta comparación te mostramos cual es el pequeño deportivo más ágil y dinámico.
En cuanto al MINI, la deportividad se respira en cada sector comenzando por su propulsor de 1.6 litros que da 211 caballos de fuerza y alcanza una velocidad máxima de 148 mph. Su transmisión es manual de 6 marchas que posibilitan desarrollar las 60 mph con partida detenida en 6.5 segundos.
Para el Fiat 500 Abarth en cambio, las cifras son diferentes. El vehículo ofrece un motor de 1.4 litros de 135 HP acoplado a una caja de velocidades manual de 5 posiciones que le permiten recorrer de 0 a 60 mph en 7.9 segundos y obtener las 128 mph de velocidad final.
La estética deportiva en ambos automóviles principalmente se vislumbra en sus líneas modificadas y en pequeños detalles que le dan mayor agresividad. En el pequeño de origen inglés, los neumáticos 205/45 R17 de bajo perfil lo hacen más deportivo, agarrado al suelo y también mejor preparado para la carretera.
El Fiat 500 Abarth a su vez, presenta cambios en la suspensión y en el chasis con respecto a la versión original. Las modificaciones que se realizaron tienen como fin disminuir el despeje al suelo.
Los interiores también reflejan el carácter deportivo del exterior. El Mini incorpora unas butacas especiales bicolor, combinadas con cuero y tela. Además añade terminaciones en grises y metales realzando su esencia, aunque lo más llamativo es su alfombra a cuadros muy extravagante que rememora a las competiciones.
En tanto, su adversario no desentona ya que también suma los asientos deportivos de piel roja o negra que generan el ambiente acorde de una versión especial. El volante, al igual que la palanca de cambios están forrados en cuero y la pedalera está confeccionada en aluminio.
Dirigidos a un público amante de la velocidad estos dos pequeños cuentan además con asistentes que facilitan la conducción tales como el sistema antibloqueo de frenos (ABS) con distribución electrónica de la fuerza de frenado (EBD), control dinámico de la estabilidad y el mecanismo de arranque en pendiente.
En definitiva, tanto el MINI John Cooper Works como el Fiat 500 Abarth presentan características semejantes, sólo le resta decidir al cliente si prefiere la tradición inglesa o el espíritu italiano.