‘Las Lavanderas’ critican y hacen reir en el teatro
Hasta El Piolín fue mencionado en el controvertido show del canal por cable Telehit que se presenta en el Teatro Los Pinos, en Long Beach
“Buenas noches”, anunció por micrófono una voz chillona femenina pero el telón del Teatro Los Pinos no se movió ni un milímetro. Luego se escuchó algo menos cordial: “Cállense el hocico”.
Ese fue un adelanto de lo que se avecinaba con Las Lavanderas.
Las dos comadres chismosas del show del canal por cable Telehit, personificadas por Karla Luna y Karla Panini, estaban atrasadas media hora para abrir su show de cruda comedia, pero se dieron tiempo para responder a los chiflidos y gritos de un público impaciente, que ya pedía descuentos en los boletos por hacerle esperar tanto.
Cuando finalmente aparecieron, la Lavandera Güera y su Comadre Morena llegaron con una ametralladora de groserías, números musicales, chistes burdos sobre el sexo y el machismo, burlas de las celebridades y más ofensas verbales que divirtieron a un público hambriento de un humor de vecindario, la mayoría del cual no puede publicarse en este periódico familiar.
De entrada saludaron muy feministas a las mujeres presentes con unos “vivas” calificados con vulgares adjetivos y comentarios y chistes de la misma cualidad que arrancaron carcajadas a la audiencia.
Luego arremetieron contra personajes populares que actualmente hacen noticias, porque a las Karlas les gusta actualizarse para cada función y las ciudades que visitan.
Entre las víctimas famosas destacó Eddie Sotelo “El Piolín”, quien recientemente perdió su popular show nacional de radio con Univision acusaciones de hostigamiento sexual. “Qué feo y qué mañoso”, dijo la Comadre Morena, después de una súper exagerada descripción de lo que supuestamente ocurrió en la cabina del locutor. Descripciones así podrían hacer vomitar a muchos. En Los Pinos predominaban las carcajadas en caras de sorpresa.
Las Lavanderas no es un show para todos. El dúo ha logrado ofender a la comunidad homosexual con sus chistes. También hace referencia a indígenas y gente de color con lenguaje tosco que algunos podrían considerar racista. En el show populacho que presenta en Los Pinos y que concluye hoy domingo, Las Lavanderas ofrecen una plétora de referencias a esos grupos.
Daría la impresión de que reflejan parte de la sociedad mexicana y sus actitudes hacia el sexo y la raza. Las dos Karlas no han dado indicios de que cambiaran el tono y sabor de su repertorio y parecen dispuestas a usar a quien les dé la gana como piñata para hacer reír a su legión de admiradores que a final de cuentas las mantienen populares.
Pero estas lavanderas saben cómo relacionarse con su público y tienen una increíble capacidad para improvisar en sus presentaciones.
“Hablan de la realidad en bromas”, dijo Sebastián Díaz, de Bellflower, después del show. Su esposa, María, dijo que le gusta que ellas le dicen a los machistas sus verdades.
“Es algo diferente”, dijo César Gutiérrez, de Los Ángeles y explicó que permiten que los hispanos aborden temas tabús como el sexo y otros. “Improvisan bien. Son rápidas de mente”.
En gustos se rompen géneros y una larga fila de personas esperaba pacientemente frente al teatro para una segunda función el sábado.