Capturan 4 poblados alauíes
En choque por segundo día, cae uno de los abastiones de Basahr al Assad
BEIRUT, Líbano. Rebeldes sirios capturaron ayer lunes cuatro aldeas alauíes en la montañosa costa mediterránea del país, en un enfrentamiento por segundo día consecutivo con las tropas del Gobierno en uno de los bastiones del presidente Bashar Assad, dijeron activistas.
Los alauíes, una rama del islam chií, son mayoría en el régimen de Assad. La captura de las ciudades en la provincia de Latakia constituye un golpe simbólico a Assad, cuyas fuerzas han estado recuperando terreno en las últimas semanas en el centro de Siria.
El conflicto de Siria ha tomado un tono cada vez más sectario en el último año, enfrentando a los rebeldes, en su mayoría suníes, con el régimen, dominado por los alauíes.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que los rebeldes capturaron las ciudades después de atacar puestos de avanzada del Gobierno en las colinas de Jabal al Akrad el domingo. El grupo, que se basa en los informes de los activistas, dijo que al menos 32 soldados del Gobierno y militares y al menos 19 rebeldes, entre ellos combatientes extranjeros, murieron en los combates del domingo.
Gran parte de Latakia ha estado bajo el firme control de las fuerzas de Assad desde que comenzó el conflicto hace más de dos años, pero algunas áreas, incluyendo Jabal al Akrad están cerca de las zonas controladas por los rebeldes y han sido escenario de combates.
Más de 100 mil personas han muerto desde que comenzó el conflicto en marzo de 2011 a raíz de protestas en gran medida pacíficas contra el régimen de Assad. El movimiento se convirtió en un levantamiento armado después de que partidarios de la oposición tomaron las armas para luchar contra la brutal represión gubernamental de la disidencia.
El Gobierno de Assad afirma que no encara una revuelta popular, sino una conspiración de los estados árabes del Golfo y Occidente, que buscan destruir a Siria suministrando a los extremistas islámicos armas y fondos.
También ayer lunes Human Rights Watch (HRW) dijo que los misiles balísticos disparados por el Ejército sirio en zonas pobladas han matado a cientos de civiles en los últimos meses.
El grupo estadounidense dijo que ha investigado nueve ataques aparentemente con misiles en los que murieron al menos 215 personas, la mitad de ellos niños, entre febrero y julio. El más reciente ataque investigado por HRW ocurrió en la provincia norteña de Alepo el 26 de julio, matando al menos a 33 civiles, entre ellos 17 niños.
Activistas de HRW visitaron los sitios de siete de los nueve ataques y no encontraron ningún objetivo militar aparente cercano, dijo el grupo.
HRW pidió a Assad detener los ataques indiscriminados.