Ley TRUST de California es un modelo para otros estados
Limitar la colaboración entre policía e inmigración mejora la seguridad pública local, indicaron expertos al referirse a la ley, conocida como Acta de Confianza, que entrará en vigencia el 1 de enero del 2014 en California y que puede servir de modelo a otros estados
Otros estados podrían seguir muy pronto el ejemplo de California, que el pasado sábado promulgó la ley TRUST para limitar la colaboración de las policías locales con el Departamento de Inmigración (ICE), declararon políticos y activistas que impulsaron el cambio y que insisten en que es necesario ampliar las protecciones a todo el país.
“No nos queda ninguna duda de que otros estados imitarán y mejorarán la ley Trust”, dijo Chris Newman, director legal de la Red Nacional de Jornaleros, organización clave en el impulso a la ley. “Está claro que en estados como Massachussets, Illinois, Nueva York y otros, donde hubo gran oposición al programa Comunidades Seguras, habrá un movimiento inmediato a favor de algo similar”.
De hecho, una ley parecida, también llamada TRUST, ya se aprobó en el estado de Connecticut en Julio y fue firmada por el gobernador de ese estado, Dannel P. Malloy.
Esencialmente, estas leyes ponen límites al alcance del programa Comunidades Seguras del gobierno federal. Una de las principales críticas al programa, implementado por el gobierno federal para revisar el estatus migratorio de todas las personas encarceladas o detenidas por autoridades locales, es que congeló las relaciones entre las comunidades inmigrantes y los agentes de la ley en pueblos y ciudades.
Esto motivaría al cambio, particularmente ahora que la ex secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, ahora Presidenta de las Universidades de California, apoyó la medida.
“Lo que está en juego aquí es la seguridad pública en cada localidad”, dijo el ex alcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa, quien participó en una teleconferencia nacional junto al autor de la legislación, el asambleísta Tom Ammiano.
“La gran mayoría de las personas que caen en la red de comunidades seguras ni siquiera han cometido un delito y esta iniciativa sólo ha servido para crear un clima de temor en California y el resto del país”.
Se trata de un simple cálculo, dijeron analistas.
“La ley Trust crea un límite razonable y presenta un cálculo práctico: hasta qué punto vale la pena que la policía local colabore con el gobierno federal ayudando a detener a determinados inmigrantes para que los deporten, si al mismo tiempo se está perjudicando en vez de ayudar a la seguridad pública”, indicó Marshall Fitz, experto migratorio del Centro para el Progreso Americano CAP, en un análisis publicado recientemente.
Incluso en California, donde la ley ya es un hecho (aunque entra en vigencia el próximo 1 de enero), aún queda un trabajo por hacer para implementarla, dijo Neidi Domínguez, de la Alianza de Jóvenes Inmigrantes de California por la Justicia.
“No sólo hay que hacer mucha educación con los diferentes grupos y comunidades sino que tenemos que trabajar con los sheriffs en los condados para asegurar que hay una efectiva implementación”, dijo Domínguez. “Dependiendo de la jurisdicción hay diferentes sentimientos de los departamentos del sheriff. Va a ser necesario trabajar mucho con ellos”.
No todo el mundo está de acuerdo en que TRUST es algo bueno. Grupos anti inmigrantes como la Federación Americana por la Reforma Migratoria (FAIR) publicó ayer un comunicado indicando que la ley TRUST, “regresará a criminales peligrosos a las calles e impedirá que las policías colaboren con las autoridades federales para expulsarlos del país”.
TRUST act no impide que se entregue al gobierno federal a delincuentes extranjeros, sólo limita a delincuentes peligrosos y violentos, entre otros, esta colaboración.