Mueren 8 por golpe de FARC
Civiles, militares y un policía calleron ayer en atentado a cuartel de guardias
EDITORES: Actualiza cifra de muertos. Ajusta subtítulo y encabezado. Agrega declaraciones de director policial. Edita. Con AP Fotos.
BOGOTA, Colombia (AP). Ocho personas, entre civiles, militares y un policía, murieron el sábado cuando presuntos rebeldes de las FARC atacaron un puesto policial en una pequeña población del suroeste colombiano, informaron las autoridades.
El ataque se produjo aproximadamente a las 5:15 de la mañana (10: 15 de la mañana, hora del meridiano de Grenwich) en la estación policial de la población de Inzá, en el departamento de Cauca y a unos 335 kilómetros al suroeste de Bogotá, indicó en diálogo telefónico el teniente coronel Mauricio Cárdenas, comandante de la policía en Cauca.
Los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzaron morteros artesanales desde una camioneta hacia la estación policial causando destrozos al puesto de los uniformados y locales cercanos, indicó el oficial.
El director nacional de la Policía, general Rodolfo Palomino, dijo que viajaba desde Bogotá a la zona del ataque para conocer detalles.
Pero inicialmente, dijo el oficial en declaraciones divulgadas por la radio Caracol, la versión es que los rebeldes habrían utilizado un camión cargado con cebollas para ocultar los artefactos explosivos artesanales y aprovechando que en poblados de la provincia colombiana cada sábado los pequeños agricultores llevan sus productos para venderlos desde muy temprano en la plaza central.
Pasadas varias horas del ataque, el Ejército indicó en un comunicado que las víctimas fatales fueron cinco militares, dos civiles y un policía.
Además siete uniformados, cuatro militares y tres policías, resultaron heridos, según la oficina de prensa del Ejército.
Los dos civiles muertos no fueron identificados de inmediato.
Más temprano, el secretario de Gobierno de Inzá, Carlos Alberto Arias, dijo en entrevista telefónica que el ataque “fue justo en el centro de la población, [la estación policial] está completamente destruida, otros inmuebles, una casa” cercanos al puesto también resultaron con destrozos.
“Los daños aún no los hemos podido cuantificar”, añadió Arias al destacar que Inzá, con unos 32 mil habitantes, no sufría un suceso similar en años.
Un ataque similar al de Inzá, que provocara muertes de civiles y uniformados, no se producía desde al menos febrero del 2012, cuando las autoridades señalaron a las FARC como autoras de un ataque en la localidad de Tumaco, una población costera del suroeste del país, con un pequeño vehículo cargado de 40 kilos de explosivos ubicado cerca de la estación policial y que provocó la muerte de nueve personas: seis civiles y tres policías.
Las FARC y delegados del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos sostienen conversaciones de paz en Cuba desde fines de 2012 en busca de poner fin al conflicto armado interno. El Gobierno ha insistido en que tales negociaciones se realicen sin declarar un cese al fuego porque asegura que en el pasado esas treguas han sido utilizadas por los rebeldes para reagruparse.