Un presupuesto positivo
Llegó la hora de reinvertir en California después de largos años de sufrimientos y recortes de gastos.
Por eso es muy bienvenido el presupuesto presentado ayer por el gobernador Jerry Brown que marca un gran contraste con los años anteriores, al elevar 9% los gastos estatales, aprovechando una bonanza en la recaudación de impuestos.
El gobernador se ha mantenido fiel a su prioridad educativa, reforzando económicamente la nueva fórmula de financiamiento local, la que beneficiará principalmente a los estudiantes de minorías y los aprendices de inglés. De igual manera, los reiterados incrementos del registro en las universidades estatales serán temas del pasado.
Cabe destacar lo fiscalmente conservador del plan de gastos del gobernador al crear una reserva de fondos como respuesta a la volatilidad de la base impositiva estatal que contribuye a la marcada inestabilidad de los últimos años.
El incremento de fondos en el área de la salud y en los subsidios de la ayuda pública también son importantes, pero estos aumentos no reparan el daño causado por numerosos recortes . Uno de ellos, por ejemplo, es elevar el bajo reembolso uno de los más reducidos del país a los proveedores de atención de los beneficiarios de Medi-Cal.
El medio ambiente es otra prioridad importante que tiene dinero propio obtenido por el llamado cap-and-trade, pero que será dedicado en gran parte al proyecto del tren rápido. Hay otros aspectos humanos más urgentes ligados a reparar el daño de la contaminación, además de la futura emisión de gases.
Dicho esto, el presupuesto cumple con las inversiones de infraestructura humana y material para reparar el deterioro sufrido durante la crisis económica. Ahora empieza un período de revisión en el cual esperamos que se hagan las correcciones debidas.