‘Dreamers’ en las Fuerzas Armadas
El presupuesto de defensa le da una nueva oportunidad a la Cámara Baja para demostrar esta semana que los jóvenes criados en Estados Unidos, que quieren servir militarmente a su patria, no deben pagar el precio de la acción de sus padres de traerlos sin papeles en orden.
En cambio, parece que esta será otra demostración de la incapacidad de la mayoría legislativa republicana de ver más allá en el tema de inmigración del temido estereotipo de una amnistía para indocumentados peligrosos.
Se espera que el congresista republicano por California, Jeff Denham, presente su proyecto de ley ENLIST, para ayudar a los “dreamers” quieran ingresar a las Fuerzas Armadas, como una enmienda al presupuesto de defensa. Lamentablemente también se anticipa que será rechazada. En teoría existe una mayoría de legisladores en el Congreso que respaldaría este ley, los dreamers son los indocumentados que, por situación personal, gozan de mayor simpatía entre los estadounidenses, según las encuestas.
Sin embargo, la creciente presión, y hasta respaldo de un sector del Tea Party para una reforma migratoria parece ser inútil.
La influencia de la Fundación Heritage y el empecinamiento ideológico de un ala conservadora de la bancada republicana tiene más fuerza que el esfuerzo los empresarios, los religiosos y los aliados en otras causas que ven lo positivo en una reforma integral o al menos ven el perjuicio que le causará en un futuro a los republicanos esta oposición a una legalización de millones de personas que llevan años trabajando y pagando impuestos en Estados Unidos.
El agregado de enmiendas a las asignaciones de presupuesto federales es un proceso común. Lo inusual es que a la hora de hablar de defensa haya un grupo de legisladores que prefiera descalificar a soldados en potencia por las faltas de los padres, que mirar las contribuciones que puedan hacer sus hijos para engrandecer y proteger su nación, Estados Unidos de América.