Discriminar por maternidad pasa factura

“Me quedaba un mes de baja por maternidad pero la entidad que me concedía la hipoteca quería que volviera al trabajo. Me sentí muy mal”. Quien habla es Linday Doyal de Jarrell, Texas. La suya fue una de las seis quejas recibidas por el departamento de Vivienda (HUD) por la discriminación sufrida por razón de embarazo o permiso de maternidad por parte de Wells Fargo.

Ahora, esta entidad ha llegado a un acuerdo con HUD para compensar con $5 millones a afectados por esta discriminación prohibida por la Ley de Equidad de Vivienda. El prestamista distribuirá $165,000 entre las seis familias que protestaron y creará un fondo para compensar a otros afectados.

Desde 2010 se han recibido 190 quejas, lo que ha resultado en más de 40 acuerdos y un total de $1.5 millones en compensaciones hasta ayer. El acuerdo con Wells Fargo es el mayor de todos y con él se manda un mensaje a los bancos que ven un riesgo que la mujer no vuelva al trabajo tras la maternidad o no tenga ingresos durante el permiso, algo que impacta los ingresos familiares.

Wells Fargo afirmaba que se ha llegado a esta acuerdo “para evitar una larga disputa legal”. En un comunicado explicaba que sus políticas son consistentes con prácticas responsables y no fuerzan a nadie a volver a trabajar. “El acuerdo resuelve quejas de cinco solicitantes a la vez que el banco procesaba unas tres millones de solicitudes de mujeres”