Piden más control en la venta de armas
Ante 'verano de violencia' senadores demócratas buscan ampliar ley para revisar antecedentes de compradores
Washington.- Frente a un “verano de violencia por las armas” e incesantes tiroteos, líderes demócratas del Senado y familiares de víctimas instaron este martes al Congreso a corregir los resquicios en las leyes para restringir la venta de armas en EEUU.
Los recientes actos de violencia en una iglesia en Charleston (Carolina del Sur), un centro de reclutamiento militar en Chattanooga (Tennessee) y un cine en Lafayette (Luisiana) han fortalecido el movimiento en EEUU a favor de un mayor control de las armas, de manera que se prohíba su venta a criminales y enfermos mentales.
Tanto los senadores demócratas, entre ellos Charles Schumer y Richard Blumenthal, como activistas, pidieron una ley para ampliar la revisión de antecedentes penales de toda persona que quiera comprar armas.
Rodeado de familiares de víctimas de la violencia, Schumer lamentó que, debido a errores humanos y sistémicos, y resquicios en las leyes en vigor, resulta fácil la venta de armas sin una completa revisión criminal de los compradores.
Ahora le toca al Congreso reparar esta red para la compra segura de armas, o de lo contrario el país seguirá produciendo titulares de “tragedias prevenibles”, advirtió Schumer.
“Tenemos que reparar esta red, fortalecerla, y expandirla. Sin esas tres cosas, seguiremos viendo cómo desaparecen en un instante jóvenes con vidas prometedoras”, agregó.
Desde diciembre de 2013, tras la masacre de 20 niños y seis maestros en la escuela primaria Sandy Hook en Newtown (Connecticut), grupos como “Mothers Demand Action” y “Everytown”, fundado por el exalcalde neoyorquino Michael Bloomberg, han pedido que el Congreso restrinja la venta de armas.
La legislación propuesta por el presidente Barack Obama sobre la revisión de antecedentes penales, sin embargo, no ha encontrado apoyo entre los republicanos que controlan ambas cámaras del Congreso.
47,000 hispanos muertos por balas
Más de 47,000 hispanos murieron por la violencia de las armas entre 1999 y 2013, con un promedio de más de 3,000 muertes al año, según un estudio nacional divulgado este martes por el Centro de Política contra la Violencia (VPC), en paralelo al evento en el Capitolio,
Del total de 47,446 de víctimas latinas, el 67% de las muertes fueron homicidios (31,800), mientras que unas 13,317, ó el 28%, fueron suicidios. Otras 896 muertes fueron accidentales, mientras que 1,433 fueron por otras circunstancias, incluyendo intervención de las autoridades y otras causas no precisadas.
En la rueda de prensa, madres y padres que han perdido hijos y ahora se han convertido en activistas, como Lucy McBath y Richard Martínez, pidieron que el Congreso tome medidas para que “ni una vida más” termine en un cementerio a causa de armas de fuego.
Se calcula que unas 88 personas mueren a diario en EEUU por culpa de la violencia de las armas, que nunca más se sentarán a la mesa ni compartirán con sus familias.
En los últimos cinco años, 15,729 armas de fuego han sido vendidas a personas que no debieron tener acceso a ellas pero que, en busca de ganancias, algunos vendedores de armas no esperaron a una completa revisión de antecedentes penales de sus clientes, lamentó Blumenthal.
El senador demócrata por Connecticut, Chris Murphy, señaló que ha habido 205 tiroteos en los 205 días desde el inicio del año y resulta incomprensible el silencio del Congreso para mejorar la seguridad ciudadana.
En ese sentido, Murphy pidió a los vendores minoristas que sigan el ejemplo de negocios como WalMart y no vendan armas a criminales, porque la “pequeña inconveniencia” de esperar unos días hasta completar la revisión penal de clientes ayuda a salvar vidas.
La reverenda Sharon Risher, que perdió a su madre y dos primos en la matanza en la iglesia afroamericana en Charleston a manos de un supremacista blanco el mes pasado, exigió acción porque, a su juicio, es “inadmisible” que, frente a crisis, el Congreso “siga evitando este asunto”.