Francia: Identifican a un sospechoso de los ataques de ISIS en París
Siete sospechosos murieron en explosiones suicidas. Las autoridades creen que estaban organizados en tres equipos de ataque. Sin embargo, aún hay muchas dudas sobre cómo se planeó este ataque simultáneo
Francia apenas se repone de uno de los peores atentados en la historia reciente de Europa. Al menos 129 personas murieron y más de 350 resultaron heridas en varios ataques perpetrados de manera casi simultánea. Pero, ¿quiénes fueron sus autores?
Un dedo hallado en el lugar donde ocurrió la peor masacre permitió a las autoridades francesas identificar al primero de los hombres que participaron en los ataques realizados el pasado viernes en París.
Omar Ismail Mostefai, un ciudadano francés de 29 años, fue señalado por los investigadores como una de las personas que participó en el ataque contra la sala de conciertos Le Bataclan, donde perdieron la vida unas 80 personas.
Se trata de un viejo conocido de los cuerpos de seguridad. Mostefai tenía antecedentes policiales por delitos comunes y era considerado como un islamista radical.
Según la prensa francesa, la policía intenta determinar si había viajado a Siria en los últimos tres años.
Mostefai sería uno de los responsables de ejecutar en Francia de uno de los peores atentados en la historia reciente de Europa.
BBC Mundo te presenta lo que se sabe hasta ahora de los atacantes que dejaron a París en alerta en la jornada de este viernes 13 de noviembre.
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¿Quiénes fueron?
Según el fiscal parisino François Molins, se sabe que al menos siete personas participaron en el ataque y murieron en atentados suicidas.
No fueron ocho los atacantes muertos, como se había dicho en un principio, cuando se difundió que la policía había abatido a uno de los presuntos autores del asalto a la sala Le Bataclan.
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“Tenemos que averiguar de dónde venían y cómo se financiaron”, dijo Molins en una conferencia de prensa.
Francia sostiene que el grupo radical islamista autodenominado como Estado Islámico está detrás de la masacre.
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Mientras, las autoridades belgas detuvieron a tres hombres este sábado que, según el gobierno del primer ministro Charles Michel, estaban relacionados con los ataques.
Bruselas investiga si uno de los sospechosos arrestados estuvo presente durante los ataques en París el día anterior o si los tres formaban parte de otro equipo de militantes que logró huir de los lugares asediados.
¿De dónde?
Uno de los atacantes era un ciudadano francés de 30 años que tenía antecedentes delictivos, pero que no había ingresado en prisión.
Se trata de un varón de la localidad de Courcouronnes, unos 25 kilómetros al oeste de París.
Los servicios de seguridad habían detectado que el hombre se había radicalizado, pero nunca formó parte de una investigación antiterrorista.
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Mientras, junto al cuerpo de uno de los atacantes suicidas, cerca del estadio Stade de France, se encontró un pasaporte sirio.
Las autoridades griegas confirmaron que el número de pasaporte coincidía con el de un refugiado sirio que cruzó a Europa por la isla de Leros hace unas semanas, aunque el gobierno heleno aclaró que el atacante también podría haber robado o comprado el documento en otro lugar.
Las autoridades griegas creen que un segundo sospechoso pudo haber llegado al continente a través de ese país.
Además, junto a otro de los atacantes se encontró un pasaporte egipcio, según la agencia de noticias Reuters.
¿Cómo llevaron a cabo los ataques?
Las autoridades francesas creen que “probablemente” se organizaron en tres equipos para perpetrar los atentados.
Todos estaban fuertemente armados con rifles de asalto Kalashnikov o AK47 y al menos siete de ellos -los muertos en el ataque- llevaban cinturones con explosivos.
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La Fiscalía francesa aseguró que por el momento las investigaciones se encuentran en su fase inicial.
Pero buena parte está centrándose en dos vehículos: un Seat negro usado por atacantes en dos de los atentados, que todavía no pudo ser encontrado. El otro, un Volkswagen Polo con matrícula belga que se encontró cerca de la sala de conciertos Le Bataclan, donde se produjo la masacre con más víctimas mortales.
La fiscalía de París asegura que el auto fue alquilado por un ciudadano francés residente en Bélgica.
Este mismo hombre fue visto manejando otro vehículo junto a dos personas más el sábado en la mañana, mientras cruzaba la frontera con Bélgica
Al menos uno de los atacantes que se suicidó junto al estadio de París tenía una entrada para asistir al partido entre Francia y Alemania, donde se concentraban 80.000 espectadores, según el diario The Wall Street Journal, que cita a uno de los guardias de seguridad del recinto.
De acuerdo al diario estadounidense, mientras le revisaban a la entrada de la cancha, la custodia del Stade de France encontró que vestía un cinturón con explosivos.
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El objetivo, según el diario, podría haber sido causar una explosión en el interior del estadio, donde se encontraba el presidente francés François Holande, provocando después una masiva estampida.
El atacante hizo estallar su carga mientras los guardias intentaban retirarle del Stade de France, aunque no está claro cuánta gente murió en esa explosión.
Por otro lado, una alerta este sábado en el hotel Pullman de Paris después de que un turista creyera ver algo sospechoso resultó ser una falsa alarma, según el ministerio del Interior francés.