La Rosca de Reyes: una rica tradición
Si te sale el monito debes llevar los tamales el 2 de febrero
La fuerte lluvia que cayó a cántaros sobre la ciudad de Los Ángeles no impidió que en la víspera del Día de Reyes, la gente abarrotara las panaderías para comprar su rosca de reyes y cumplir así con la tradición de los Santos Reyes.
http://content.jwplatform.com/players/iRNwdBlS-rqn0kHFM.js
“Para los panaderos el Día de Reyes es nuestra Navidad, ya que es el día del año que mejor nos va. Nosotros llegamos a vender más de 1,000”, dice Guadalupe Martínez, una inmigrante de Guanajuato, México, propietaria de la panadería Gourmet L.A. ubicada en el centro angelino, en el 548 al sur de la calle Broadway.
Martínez aclara que comienzan a preparar y vender roscas desde el fin de año, ya que muchas familias anticipan el festejo del Día de Reyes porque muchas veces el 6 de enero no se pueden juntar.
Tradición
La costumbre es invitar a la familia o a los amigos a partir cada quien su porción de la rosca y ver quién saca el o los pequeños muñecos dentro del pan, representaciones plásticas del Niño Jesús. La persona que lo encuentra debe ofrecer una fiesta con tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
“Antes poníamos sólo un Niño Jesús, pero como la economía se ha puesto difícil, decidimos poner dos o tres para que entre varios hagan la fiesta y pongan los tamales, así la carga no es tan dura”, explica sonriente Martínez mientras el panadero José Favela no cesa un minuto de preparar las roscas.
Martínez cuenta que llegan a comprar roscas no solo inmigrantes mexicanos de Los Ángeles sino de Santa Mónica, San Bernardino y Oxnard. “Y no sólo mexicanos o latinos sino judíos, italianos, y franceses”, precisa.
La rosca de reyes está hecha de harina, azúcar, levadura y huevos. “Salida del horno, se adorna con higo, ciruela pasa, até de membrillo y de guayaba, piña y cerezas”, agrega.
Añade que ella manda traer la harina de México y las hace con mantequilla en lugar de manteca. “Nosotros les ponemos huevos reales y no polvo de huevo como en otras partes. Por eso nuestras roscas son únicas y tienen tanto éxito. La clave para que salgan sabrosas es hacerlas a la antiguita”, dice orgullosa.
La abogada en migración Verónica Villegas se adelantó un día a comprar su rosca de reyes en esta panadería. “Yo ya nací aquí pero mis padres son de México y es una tradición que nos reunamos a partir la rosca y disfrutarla en familia”, dijo contenta. “Es muy bonito la emoción cuando esperas para saber a quién le toca el niñito Jesús”.