Continúa juicio contra Medrano, acusado de secuestrar y violar a jovencita por 10 años
La mantuvo secuestrada por 10 años, la violó, amenazó y obligó a formar una familia con él — pero el hombre lo niega todo
De ser encontrado culpable de los cargos, Isidro Medrano García, de 42 años, pasaría el resto de sus días en prisión. Crédito: Suministrada
Isidro Medrano García, el mexicano que presuntamente secuestró, violó, amenazó y obligó a la hija de su exnovia a formar una familia con él, vivió con entereza una jornada de martes en el tribunal californiano de Fullerton, donde la fiscalía llamó a declarar a su expareja sentimental y madre de la denunciante.
En la segunda sesión del juicio, Rosa María Cedeño, de 41 años, retrató al acusado como un maltratador que después de un violento ataque abandonó el hogar que compartían y se llevó con él a la joven Mayra, que entonces tenía 15 años.
Medrano, de 42 años, fue detenido en 2014 después de una década de convivencia con la denunciante y podría pasar toda su vida en la cárcel si es condenado.
Agresión y secuestro
Según Cedeño, el supuesto rapto sucedió el 3 de agosto de 2004 después de un enfrentamiento verbal que terminó en agresión física cuando la mujer decidió que había llegado la hora de que ella y sus tres hijas se alejaran de Medrano.
“Me estaba jalando las greñas y me golpeaba en la cara con el puño cerrado”, relató esta mexicana indocumentada ante los miembros del jurado.
“Me salía sangre de la nariz”, agregó Cedeño, quien entonces compartía apartamento con el acusado en Santa Ana, junto con sus tres hijas.
Antes de que Cedeño pudiera salir, Medrano “empujó la puerta para que no la abriera”, contó la madre.
Tras el altercado, que se produjo en presencia de las tres hijas, Cedeño se refugió en la casa de unos vecinos en la primera planta del edificio.
Una hora después, la policía se personó en la zona y tomó declaración a la inmigrante que explicó que una vez se fueron los agentes, Medrano la recriminó por avisar a las autoridades.
“Le dije que me dejara en paz y me dijo que no me iba a dejar en paz con mi hija”, aseguró la inmigrante.
Según la expareja de Medrano, este fue el momento en el que el mexicano secuestró a Mayra y, contra su voluntad, la separó durante años de su madre y hermanas.
La madre denunció la desaparición de su hija y no volvió a saber de ella hasta que en mayo de 2014 la joven contactó con su hermana a través de las redes sociales. Aquel encuentro terminó con el arresto de Medrano.
Durante esa década, según la Fiscalía, el hombre la obligó a formar una familia con él. Se casaron -él con un nombre falso- y tuvieron un bebé en 2010, bajo amenazas de que ella lo perdería todo si hablaba con la policía. Ambos vivieron como pareja en Bell Gardens, cerca de una estación de policía, sin que los vecinos sospecharan.
La versión del acusado
El abogado de oficio asignado para defender a Medrano, Seth Bank, trató de desmontar la versión de Cedeño en el turno de réplica para demostrar al jurado que todo se trata de un montaje contra el acusado.
Recurriendo a informes policiales, el letrado cuestionó las motivaciones de Cedeño y de Mayra para emprender acciones legales.
Bank destacó que el informe redactado por la policía el día de la presunta agresión no reflejaba que Cedeño presentara lesiones físicas.
El abogado insinuó incluso que tanto Cedeño como Mayra, ambas indocumentadas, pudieran estar tratando de regularizar su situación migratoria a través de una visa U. Cedeño negó que esa fuera su intención y dijo desconocer los requisitos para solicitar o iniciar dicho trámite.
La defensa recurrió además al único informe policial en el que Cedeño denunció a Medrano por violencia física e indicó que la policía no adoptó medidas contra el hombre porque la pareja “combatía mutuamente”.
El miércoles está prevista la comparecencia de Areli, la hija de 23 años de Cedeño. Fue ella quien, en 2014, recibió una solicitud de amistad de Mayra a través de Facebook, lo que culminó en el reencuentro familiar de las hijas y la madre.
