La única mujer en la lista de mejores tatuadores de L.A.

Plasmar sobre la piel el rostro de una persona es un reto que Christina Ramos cumple con maestría.

Su arte es tan preciso que es difícil distinguir la foto que usó como muestra del tatuaje que implantó con tinta sobre alguna parte del cuerpo.

Esa habilidad que corroboran las imágenes que ha grabado sobre sus clientes le han abierto camino en un mundo dominado por hombres.

Cuarta parte de una serie sobre mujeres incursionando en oficios dominado por los hombres

Ramos, nacida en España hace 32 años, es considerada una de los diez mejores tatuadores de Los Ángeles, hogar de algunos de los artistas más talentosos del mundo.

De hecho, ella es la única mujer en la exclusiva lista que publicó el semanario LA Weekly, una distinción que no deja de impresionarle.

“Siempre había querido ser tatuadora pero lo veía como un mundo muy exclusivo” relata Ramos, entrevistada en su estudio dentro del local True Tattoo, sobre el buvelar Cahuenga, en Hollywood.

No es tarea fácil

Pero entrar en esa industria no fue fácil. En su natal Alicante, una ciudad en la costa mediterránea, no encontró mentores y en Los Ángeles lo halló en 2008, tres años después de su llegada con la idea de estudiar música. Sus primeros trabajos los elaboró en un estudio en Crenshaw, en el sureste angelino.

“Me dijo mi maestro que si me defendía bien ahí me podía defender en cualquier situación”, contó refiriéndose a uno de los vecindarios más bravos de esta metrópoli.

Contenido Relacionado

Muy pocas latinas en Los Ángeles se abren paso entre el fuego

Cada vez hay más latinas trabajando en campos dominados por hombres

Una latina dirige al LAPD en el noroeste del Valle de San Fernando

Ramos conversó con La Opinión después de asistir al Mondial Du Tatouage, la convención en París de los artistas del tatuaje, y mientras hacía planes para viajar al festival Viva La Tinta, que se realiza en Guadalajara, en México, dos eventos que son parte de su formación profesional.

Sin la ayuda de los programas de TV, los deportistas, los músicos y los actores, no serían tan populares los tatuajes.

Esto se confirma en la agenda llena de Ramos, pero ella dice que no descuida la dedicación a cada uno de sus trabajos y aún prefiere el contacto personal en la etapa de planeación.

“El papel que deberíamos tener las mujeres es prácticamente centrarnos en la calidad de nuestro trabajo, el estudio, la práctica de la confección del tatuaje, porque es lo que te va a llevar a ser respetada como tatuadora”, reflexiona la española.

Tatuajes populares

Un estudio nacional reveló en 2012 que el 59% de las mujeres tenía al menos un tatuaje, comparado con el 41% de los hombres; sin embargo, ellas son minoría en los estudios donde los plasman.

Se estima que las mujeres representan una cuarta parte de los tatuadores en esta ciudad, de las cuales las inmigrantes son muy pocas. Los mexicanos están mejor posicionados.

Sabiendo de la responsabilidad sobre sus manos, Ramos se enfoca en mejorar su técnica, en mejorar en cada dibujo, incluidos los de gran tamaño que graba sobre las espaldas.

“Todos los tatuajes los hago difíciles, siempre intento hacer lo mejor posible en cualquier cosa que me venga por la puerta”, expresa.

No hace mucho le hizo un tatuaje a la actriz Jennifer Garner.

En un oficio donde las artistas suelen terminar como modelos, Ramos se opone a la superficialidad.

“No te vendas con tu exterior, vende tu habilidad”, recomienda a sus colegas migrantes.

Página de Christina Ramos: www.christinaramostattoo.com/
Su cuenta de Instagram: www.instagram.com/christinasramos/