Atlético Nacional, es otra historia sin narcos, ni maletines
El Atlético Nacional aspira a su segunda corona en la Copa Libertadores después de la obtenida en el oscuro final de los años 80
Los aficionados del club Atlético Nacional están en el umbral de convertirse en monarcas de la Copa Libertadores por segunda ocasión, pero a diferencia del título que lograron en 1989, en esta oportunidad no los acompañarán las sombras de ser un equipo vinculado con el narcotráfico en su trayecto hasta la final del certamen.
El conjunto de la ciudad de Medellín, Colombia, recibirá en el Estadio Atanasio Girardot el duelo de vuelta de la serie por el título este miércoles después de lograr un empate de 1-1 con el sorprendente equipo del Independiente del Valle de Ecuador, en el Estadio Olímpico Atahualpa, de Quito.
Hace 27 años fue imposible que el duelo definitorio se realizara en su casa, el Atanasio Girardot, al no contar con capacidad para 50,000 aficionados y fue en el Nemesio Camacho, en Bogotá, donde alzaron el primer cetro del torneo de clubes de Sudamérica en la historia del fútbol colombiano tras vencer en tanda de penales (5-4) al Olimpia de Paraguay, luego de igualar el marcador global a dos tantos tras la derrota sufrida por 2-0 en Asunción.
El cuadro de “Los Verdolagas” consumó la proeza de forzar los penales al ganar en el tiempo regular por dos tantos. Los festejos en Medellín y el resto de Colombia fueron acompañados por comentarios acerca de que el narcotraficante Pablo Escobar era en esa época el mecenas del equipo y quien pagaba los salarios de muchas de las figuras del conjunto, entre quienes sobresalían el arquero René Higuita, el infortunado defensor Andrés Escobar, el mediocampista Leonel Álvarez y el delantero John Jairo Tréllez, la columna vertebral del equipo.
Las fotos de Pablo Escobar con jugadores del Atlético Nacional o apoyando en los estadios al equipo fueron algunos de los guiños mediáticos de la relación del club con el traficante de drogas más connotado de los años 80 y 90.
Esa final de 1989 trascenderá la historia de la Copa Libertadores por ser una de las más raras para la definición de un campeón. Después de que Olimpia no supo manejar la ventaja de dos tantos con la que llegó a Bogotá, en la tanda de penales, en la que fueron los primeros en abrir la serie, fallaron cinco de nueve disparos y los últimos cuatro consecutivos de la muerte súbita. Fue hasta que Leonel Álvarez marcó el quinto tanto del Atlético Nacional, en el noveno disparo de la tanda, que se definió el título.
El maletín
La especulación sobre el vínculo del narcotráfico con el conjunto fue expuesta años después cuando el juez de línea argentino Juan Bava sacó a la luz una narrativa en la que él y el resto del cuerpo arbitral que se hizo cargo del duelo de vuelta de las semifinales de esa edición de la Copa fueron contactados por un grupo de narcotraficantes, quienes les dejaron un maletín con dinero y la advertencia de que el Atlético Nacional debía llegar a la final.
Bava contó la anécdota al diario de su país El Gráfico. Dijo que un día antes del encuentro entre el conjunto colombiano y el Danubio de Uruguay, tras su igualada 0-0 en la ida en Montevideo, unos hombres entraron en sus habitaciones en el hotel con el maletín y la advertencia de que el Nacional no podía quedar eliminado a costa de sus vidas.
El juez de línea recordó que el árbitro central Carlos Espósito le dijo que no sabía qué hacer y él le respondió: “Yo sí; si estos están empatados faltando cinco minutos yo entro a la cancha y metó el balón en el ángulo…”. Ese partido finalizó con un contundente 6-0 a favor del Atlético Nacional sin que los árbitros se vieran en la necesidad de tomar una decisión que diera ruta a la victoria, pero el marcador dejó la duda: ¿los jugadores del Danubio habrán recibido una visita similar a la que contó Bava antes del encuentro en Medellín?
‘Los dos Escobar’
La relación de Pablo Escobar con los futbolistas no fue un secreto y cuando el capo fue detenido, uno de los que lo fue a visitar a la cárcel fue la figura del seleccionado nacional René Higuita, de acuerdo al testimonio vertido por el propio exarquero en el documental “Los dos Escobar”.
Con la muerte del capo en 1993, el Club Deportivo Atlético Nacional dejó de ser vinculado con el narcotráfico y en 1996 fue adquirido por el conglomerado de la Organización Ardila Llülle, que posee empresas en el sector de telecomunicaciones, automotriz, de bebidas y aseguradoras, y con su propietario desde la mitad de los 90 se convirtió en el equipo más laureado del fútbol colombiano desde el año pasado con 15 títulos de liga (ocho en la época de los torneos cortos desde 2002).
El presente
“Los Verdolagas” están a un paso de consumar un capítulo dorado luego de ser los mejores de la fase de grupos, y en las rondas de eliminación han dejado fuera a equipos argentinos (Huracán y Rosario Central) y uno brasileño (Sao Paulo), naciones que dominan en la historia del certamen.
El campo del Atanasio Girardot se apresta a recibir su primer duelo de una final de Libertadores, en un año en el que los resultados del Atlético Nacional no han dejado dudas, como se especuló hace casi tres décadas con el que sigue siendo el máximo éxito en su historia.
Vistazo al Atlético Nacional
18 participaciones tiene en Copa Libertadores y sólo un título (1989)
15 títulos de liga posee para ser el máximo ganador en la historia del fútbol colombiano
69 años han transcurrido desde su fundación, ocurrida en 1947