Kershaw se parte el brazo y los Dodgers cumplen su misión en Chicago
La novena angelina equilibra las cosas de la mano de su abridor estrella y su cañonero mexicano, y la serie viaja al Dodger Stadium
Clayton Kershaw enterró para siempre la leyenda de no contar con las agallas para lanzar en los playoffs y con otra brillante actuación de pitcheo, apoyada por un cuadrangular de Adrián González, los Dodgers vencieron 1-0 a los Cachorros de Chicago la noche de este domingo.
El triunfo en Wrigley Field le permitió al equipo de Los Ángeles empatar a una victoria por bando la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, la cual se reanudará el martes en Dodger Stadium.
El domingo, Kershaw se presentó por tercera ocasión en un lapso de seis días en el montículo por los Dodgers. El zurdo se acreditó la victoria de su equipo el martes pasado al trabajar seis entadas y dos tercios en el cuarto juego de la Serie Divisional ante los Nacionales de Washington y el jueves fungió como relevista en el quinto y decisivo partido para apuntarse el salvamento del encuentro en la capital.
Setenta y dos horas después de ese esfuerzo como relevista, Kershaw lanzó siete brillantes entradas ante los Cachorros en las que admitió solo dos hits y ponchó a seis enemigos a cambio de una sola base por bolas.
La actuación de postemporada del as del pitcheo de los Dodgers es impresionante si se toma en cuenta que por dos meses estuvo fuera de acción por una lesión en la espalda.
“Esto representa mucho para mí porque la verdad hubo un momento en la temporada en el que creí que no podría volver a lanzar este año”, dijo Kershaw después de vencer a los Cachorros.
El abridor de los Dodgers tuvo las armas necesarias para defender la ventaja en la pizarra que desde muy temprano le entregó Adrián González. El cuarto bat del equipo angelino disparó en la segunda entrada un cuadrangular que se comió toda la barda del jardín central-izquierdo.
“Solo hice contacto y la pelota comenzó a tomar fuerza y altura hasta que se convirtió en jonrón”, admitió González.
El tablazo sobre el abridor de Chicago, Kyle Hendricks, fue suficiente para hacer que la serie se extienda a por lo menos cinco encuentros, aunque por la forma en que los Dodgers están jugando, esto pinta para irse largo. Los tres siguientes juegos serán en Los Ángeles.
“Me gustan nuestras posibilidades de ganar la serie, estamos en la situación que queríamos antes de iniciarla”, afirmó González.
La decisión de dejarlo
Los Dodgers pasaron momentos atribulados en la séptima entrada cuando Kershaw regaló la base por bolas al primer bateador del inning, Anthony Rizzo, pero el zurdo procedió entonces a ponchar a Ben Zobrist y dominar con un elevado a Adisson Russell. Después de ese out, el manager Dave Roberts subió al montículo para explorar la idea de remover del partido a Kershaw.
“Le dije a Dave que me dejara, que podía sacar al siguiente bateador”, explicó Kershaw sobre la conversación.
El abridor cumplió su cometido al hacer que Javier Báez sacará un largo elevado al jardín central, el cual en un momento parecía llevar la fuerza suficiente para convertirse en cuadrangular.
“Por un instante pensé lo peor, creía que por lo menos sería un doblete contra la barda del jardín central”, admitió Kershaw.
Después de despachar siete entradas, Roberts le dio la pelota a Kenley Jansen para que sacara los últimos seis outs y de esa manera se apuntara el salvamento del partido.