Edgardo Bauza se tambalea como técnico de Argentina y suena Sampaoli
La definición será la semana próxima, al cabo de varias reuniones
Edgardo Bauza será durante este fin de semana el entrenador del seleccionado argentino. Pero se mantiene en su puesto de manera virtual. No hubo ningún llamado de los dirigentes para asegurarle la continuidad, un gesto mínimo que habría desactivado un show que no se merece. Y los futbolistas continúan en la comodidad de haber regresado a sus clubes y olvidarse, por cinco meses, del trauma de tener que clasificar a la Argentina al Mundial de Rusia.
El desenlace se postergó para el próximo miércoles, cuando el flamante presidente de la AFA , Claudio Tapia , se reúna con el director técnico. Antes, Tapia escuchará a Marcelo Tinelli. Y el martes habrá una puesta en común sobre el tema de todos los dirigentes en la reunión del comité ejecutivo. Los nuevos administradores no eligieron a Bauza, sino que lo heredaron, y entonces se sienten habilitados a echarlo.
Jorge Sampaoli espera ansioso en Sevilla, entre sondeos de Roma y Dortmund para la próxima temporada. Sabe que, otra vez, es el máximo candidato. A finales de mayo, cuando concluya la liga española, su cláusula de rescisión será mucho menos prohibitiva que los 8 millones de euros que costaba en julio del año pasado. Su salida de Sevilla, en junio, implicará 1,5 millones euros.
“El Patón está débil, pero no muerto”, intentaron disimular ayer en los pasillos de la AFA. Realista, Bauza ya entendió que, si no lo llamaron para contarle que harían todo lo posible para mantenerlo en su puesto, no hay futuro. Si la AFA quisiera mantenerlo, habría enviado señales contundentes. En zona de repechaje, sin Lionel Messi por tres partidos más y con Javier Mascherano envuelto en duelos en las redes sociales, Bauza esperaba un espaldarazo. No lo tuvo ni lo tendrá. Tinelli ha tomado distancia: ¿olvido o estrategia?
Algunas personas de su entorneo aconsejaron al técnico y le dijeron que no tiene sentido resistir. ¿Para qué? Entre tantos manoseos y operaciones, su figura ha quedado aun mucho más debilitada. ¿Cómo seguir trabajando en un lugar donde casi todos se atropellan para gritar que no lo quieren? ¿Cómo convencer a jugadores que siempre lo espiaron con desconfianza? Aun así, no piensa renunciar y el lunes estará en su oficina del predio de Ezeiza.
Tapia no quiere apresurarse, pero la ola opositora lo desborda. Cesantear al entrenador del seleccionado, romper un contrato, es el peor comienzo para una gestión que prometió una refundación mediante el orden y la transparencia. En estos días sólo procurarán darle algún ribete más prolijo a la salida. Por ejemplo, conversar con él, mirarlo a los ojos. Despedirlo en la cara. Frontalidad es lo mínimo que merece alguien que aceptó suceder a Martino cuando apellidos mucho más calificados rechazaron el desafío.
¿El tema económico es condicionante? Es relativo. La AFA , que todavía debe dinero a Martino y a su cuerpo técnico, tendría que saldar el contrato de Bauza hasta diciembre, pagar la rescisión de Sampaoli en Sevilla y firmar otro vínculo, con el DT santafecino. La suma supera los 30 millones de pesos. Pero la inyección de dinero que ingresará por los nuevos contratos televisivos anima a la nueva tesorería.
Anoche Nicolás Russo, tras la primera reunión del comité ejecutivo, sostuvo sin que nadie pudiera creerle que ni se trató la continuidad o no de Bauza. Durante la tarde, muchos dirigentes hicieron trascender las razones para la inminente destitución: que no está llevando al equipo al Mundial de Rusia, que los jugadores no le responden, que declara mal ante los medios… Y agregaron algunas bajezas, como que ha perdido contacto con la realidad -por sus declaraciones, algunas entusiastas, otras burlonas y las últimas desafiantes- y que hasta se confunde los nombres de algunos jugadores. Un operativo desgaste. Deleznable.
Estos dirigentes no quieren dejar rastros del Comité de Regularización, que puso en funciones a Bauza el 1º de agosto de 2016. Y con Daniel Angelici al frente, si además pueden arrastrar a Marcelo Tinelli, ideal. Por cierto, ni el conductor televisivo llamó a Bauza. Se sienten habilitados a despedir al Patón porque Armando Pérez le firmó un contrato que excedía su mandato. “Es ahora o nunca”, aseguran para explicar que si sostienen a Bauza y la Argentina pierde contra Uruguay el 31 de agosto, cuando se reanuden las eliminatorias, los volvería “cómplices” de la elección del Comité de Regularización. Mejor, diferenciarse ya con un cambio de timonel.
Los jugadores, reyes de las redes sociales, tan activos para muchas zonceras, en los temas profundos nunca se expresan. Una señal de ellos blindaría a Bauza, pero se mantendrán lejos. No van a pedir que echen a Bauza. Nunca destituyeron intencionalmente a nadie. Actúan desde el silencio frente a los entrenadores de turno, pero con gestos, evasivas y haciendo trascender opiniones condicionan un proyecto. Un liderazgo inexplicable. Ya tendrían que haber entendido que no sirve. Están a cuatro partidos de perderse el Mundial de Rusia.