Bebé abandonado en una caja de cartón se convierte en increíble cantante
La vida cambia y nos regala segundas oportunidades cuando menos lo esperamos
Hace años, una pequeña niña fue abandonada en una estación de tren en China. La pobre bebé solo tenía un mes de edad cuando la dejaron dentro de una caja de cartón, sola y envuelta en una chaqueta azul.
Afortunadamente, una desconocida la encontró, la recogió y la llevó a un orfanato.
Al tiempo que esto ocurría, en Estados Unidos, Chuck y Kim Walker sintieron la necesidad de aumentar la familia. La pareja, dos años después de tener a su primer hijo, había perdido a su segundo bebé al nacer.
Chuck y Kim decidieron adoptar a una niña en el año 2000, pero no sería la única. Tres años más tarde, decidieron adoptar a otra pequeña.
La pareja había escuchado innumerables historias sobre las niñas en China que necesitaban desesperadamente hogares seguros y estables. Muchos de estos niños huérfanos son abandonados en las calles, obligándoles a defenderse solos, quedando apartados de la sociedad, sin disfrutar de derechos ni necesidades básicas.
Los Walker lo tenían claro, querían adoptar a una niña China, por lo que viajaron al páis. La agencia y el orfanato le asignaron un bebé que había sido abandonado en la estación de tren. El bebé tenía ahora 1 año de edad.
En cuanto la vieron, supieron que era su bebé. La llamaron McKenzie Grace.
Chuck y Kim volvieron a Estados Unidos a la pequeña McKenzie, pero cuando entraron por la puerta, vieron cómo la atención de McKenzie se dirigía inmediatamente al viejo reloj de la cocina, que emitía música. La niña, al escuchar el sonido, caminó hasta el reloj e hizo algo que cambió el curso de su vida.
Desde ese momento, cantar se convirtió en su vida. Esta es su historia.