Incendios afectan a residentes vulnerables que viven aislados
Personas mayores y discapacitadas corren mayores riesgos en áreas de catástrofes
Cuando el fuego llegó a su casa estaban durmiendo. Charles Rippey, de 100 años, y su esposa, Sara, de 98, estuvieron casados por 75 años. Murieron juntos, después de que un cuidador luchó por salvarlos, pero no los pudo sacar a tiempo.
Una mujer de 27 años tenía espina bífida y usaba una silla de ruedas. En las horas posteriores al estallido de los incendios, sus familiares buscaron frenéticamente información sobre su paradero. Cuando un inspector de bomberos visitó su hogar, encontró su cuerpo.
Los incendios forestales continúan extendiéndose a través de los condados del norte de California, y ya han muerto al menos 41 personas. Cientos más están desaparecidos. Los funcionarios y defensores locales temieron, como en realidad ocurrió, que muchos de ellos fueran adultos mayores o con desafíos físicos que no les permitieron huir de una situación de emergencia.
Otros están vivos porque tuvieron suerte, o porque sus vecinos pensaron rápido.
En la comunidad de Redwood Valley del condado de Mendocino, el bombero retirado RedHawk Palleson encontró a una mujer mayor deambulando desorientada por su vecindario y a una pareja también mayor en batas de baño mientras las llamas los perseguían por la calle, reportó el periódico Santa Rosa Press Democrat. Palleson los llevó a su camioneta.
Las muertes y las vidas en riesgo ilustran la particular vulnerabilidad de las personas débiles que viven solas, durante un desastre que avanza con rapidez, como estos incendios.
“Los incendios han planteado muchas preguntas sobre cómo respondemos y brindamos seguridad a las personas vulnerables en una crisis inminente”, dijo Marty Omoto, director ejecutivo de la Red de Acción Comunitaria de Discapacidad de California. “Tenemos que preguntarnos cómo respondemos cuando no hay un aviso previo”.
Tanto en Sonoma como en Napa, donde los incendios forestales han sido los más severos, aproximadamente el 18% de los residentes tiene 65 años o más. Entre el 6 y el 8% de los residentes de esos condados tienen discapacidades.
En los últimos días, familiares de personas desaparecidas comenzaron a pedir ayuda a través de las redes sociales, preguntando por el paradero de sus seres queridos.
“¿Alguien ha visto a la mujer a la derecha?”, escribió Elizabeth Northrup, en Facebook, posteando la imagen de una mujer mayor. “Se llama Norma Lou Peoples. Usa un andador rojo”.
Los hogares para adultos mayores no son seguros, como lo ilustró trágicamente la muerte de ocho personas en un sofocante hogar para adultos mayores de la Florida que no contaba con aire acondicionado después del huracán Irma.
Estos hogares, junto con hogares de vida asistida y hogares para discapacitados, tienen planes de desastre y evacuación. Pero los cuidadores rara vez reciben capacitación para ayudar a los pacientes en caso de emergencia, dijo Omoto, y en caso de desastre, dichos cuidadores pueden tener a sus propias familias que cuidar.
Marianne McBride, presidenta y directora ejecutiva del Concejo sobre el Envejecimiento del condado de Sonoma, dijo recientemente que ella y su equipo aún intentan rastrear a clientes de servicios sociales de la agencia, incluyendo hasta 1,200 que regularmente reciben comidas a domicilio.
Precauciones
En un fin de semana reciente, los teléfonos celulares no funcionaron, o solo lo hacían de manera esporádica, mientras el fuego destruía 73 torres de telefonía móvil. No hubo internet ni electricidad en algunas áreas.
McBride, cuyo hermano perdió su hogar en los incendios, dijo que las personas mayores o discapacitadas deberían considerar mantener sus líneas terrestres en lugar de depender solo de teléfonos celulares. También dijo que los proveedores de servicios sociales deben guardar copias en papel de las ubicaciones de los clientes para consultar cuando fallan los servicios eléctricos y de internet.
También recomendó que los familiares conozcan a los vecinos de sus parientes mayores y les proporcionen su información de contacto, en caso de emergencia.
“No hay una agencia de servicios que pueda atender a todas las personas mayores de la comunidad”, dijo McBride, entre lágrimas. “Lo que revelan los incendios es que la única forma en que vamos a envejecer con éxito es si lo hacemos en comunidad, y la comunidad siente que tiene la responsabilidad de cuidar a los vecinos y darles los recursos que necesitan”.
Los expertos en desastres dicen que las recomendaciones generales de preparación son aún más importantes para las personas con movilidad limitada. Por ejemplo, mantenga el auto con gasolina, coloque un cambio de ropa y un kit de emergencia en el maletero y suscríbase al sistema de alerta de su comunidad (aunque hubo algunas quejas de residentes del norte de California que nunca recibieron estas alertas).
Nancy McPherson, directora estatal de AARP en California, invitó a la gente a aprender con anticipación las rutas a los edificios que podrían ser utilizados como refugios durante una emergencia, como una escuela local.
Algunas comunidades han tratado de desarrollar registros de personas mayores y personas discapacitadas que podrían necesitar rescate en emergencias, pero estos registros son difíciles de mantener actualizados, dijo McPherson.
“Se ha pensado mucho en esto, pero los planes se ponen en un estante y tendemos a olvidar que están allí”, dijo McPherson.