Las aterradoras alucinaciones de Fergie bajo el efecto de las metanfetaminas
Fue víctima de las drogas
Antes de convertirse en una madre de familia y solista de éxito, Fergie lidió con una grave adicción a las metanfetaminas que le provocó serias alucinaciones.
“Padecía demencia y psicosis inducida por los químicos. Tenía alucinaciones todos los días, y pasó un año antes de que desaparecieran después de que dejara de consumir, ese fue el tiempo que tardó mi cerebro en reajustarse. Podía estar sentada como si nada, y al mismo tiempo estar viendo una abeja o un conejo que no estaban realmente aquí”, ha recordado la artista en una entrevista al portal iNews.
En los peores momentos de su adicción, la cantante de los Black Eyed Peas estaba convencida de que la CIA, el FBI e incluso un cuerpo de policía de élite rastreaban cada uno de sus movimientos.
“Recuerdo que en una ocasión intenté esconderme en una iglesia, y obviamente intentaron echarme a la calle porque no paraba de correr por los pasillos de la nave como una loca porque pensaba que había una cámara de infrarrojos que intentaba analizar mi cuerpo. Salté por encima del altar mientras dos personas me perseguían. Recuerdo que pensaba que, si salía afuera y había un equipo SWAT esperando, entonces significaría que yo tenía razón. Pero no había nadie, y entonces me di cuenta de que eran las drogas las que me estaban haciendo ver cosas y que iba a acabar internada en una institución”.
Esa experiencia ayudó a la cantante a abrir los ojos y darse cuenta de que tenía un grave problema con el que debía lidiar cuanto antes.
“Si era todo culpa de las drogas, yo ya no quería seguir viviendo así. Cuando salí de la iglesia y me cercioré de que no había nadie allí fuera, que estaba yo sola en un aparcamiento, fue un momento muy liberador”, afirma.
Ahora, Fergie no trata de suavizar los motivos que le llevaron a engancharse a las metanfetaminas -le resultaban muy divertidas en un principio-, pero insiste en que ese tipo de sustancias siempre acaban volviéndose en contra de quien las consume.
“Todo eso de las drogas, era jodi**mente divertido, hasta que dejó de serlo… Pero sabes qué, doy gracias por el día en que todo se torció para mí porque eso fue lo que me dio la fuerza para dejarlo, junto a mi fe y la esperanza de que hubiera algo mejor esperándome”.