Casa Blanca: dictamen que protege “DACA” es “indignante”
El dictamen resta urgencia en las negociaciones bipartidistas en el Congreso para una solución permanente para "Dreamers"
WASHINGTON— La Casa Blanca calificó este miércoles de “indignante” un dictamen emitido anoche en un tribunal de San Francisco (California) que protege de forma temporal el DACA mientras se resuelve el asunto en los tribunales.
El juez federal William Alsup ordenó anoche que la Administración Trump reanude la aceptación y procesamiento de renovaciones de permisos, tanto para los “DACAmentados” que no cumplieron con el plazo de octubre pasado como para los que tenían permisos con fecha de vencimiento más allá del próximo 5 de marzo.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo en una declaración escrita la decisión es “indignante, especialmente a la luz de la exitosa reunión bipartidista del presidente” con líderes demócratas y republicanos del Congreso ayer.
“Un asunto de semejante magnitud tiene que atravesar el proceso legislativo normal. El presidente Trump está comprometido con el imperio de la ley, y trabajará con miembros de ambos partidos para lograr una solución permanente que corrija la acción inconstitucional que tomó la anterior Administración”, puntualizó.
El comunicado de Sanders, sin embargo, no especifica si la Administración prevé apelar el dictamen ante un tribunal superior.
Más adelante, al inicio de una reunión con su Gabinete, el presidente Donald Trump afirmó hoy que su postura respecto al muro fronterizo jamás cambiará pero espera lograr un acuerdo con el Congreso sobre el futuro de “DACA”.
Trump se congratuló por la cobertura positiva que tuvo su reunión de ayer con líderes del Congreso sobre “DACA”, pero se quejó de que, antes de que asumiera el poder, “el país era un lío, nadie sabe realmente cuál es el número” de beneficiarios.
Sin embargo, la Oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) sí tiene las cifras, porque cada “DACAmentado” tenía que inscribirse en el programa, entregar toda clase de datos personales y someterse a un riguroso proceso de revisión de antecedentes.
Asimismo, Trump reiteró que las negociaciones de DACA no deben estar vinculadas con las del presupuesto del gobierno, incluyendo fondos para de defensa.
Trump también tendrá una rueda de prensa en la tarde con la primer ministro de Noruega, Erna Solberg, y se prevé que haga más declaraciones al respecto.
Ayer, durante su extensa reunión con líderes del Congreso, que fue televisada casi en su totalidad, Trump dijo que está dispuesto a “asumir las consecuencias” y ataques de grupos de su base opuestos a proteger a los “Dreamers”.
Durante la contienda de 2016, Trump dijo que “DACA” era ilegal y prometió desmantelarlo. Cumplió la promesa pero ahora quiere quedar bien con todos los bandos: pide un “proyecto de ley de amor” para los “Dreamers”, pero aunado a medidas para fortalecer la seguridad fronteriza, reducir la inmigración legal, y la persecución de los inmigrantes indocumentados al interior del país.
Anoche, el portavoz del Departamento de Justicia, Devin O´Malley, reiteró que la Administración Obama implementó “DACA” de forma ilegal y unilateral para obviar al Congreso.
También justificó que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) tenía la autoridad legal para eliminar DACA “de forma ordenada”, porque el cumplimiento del imperio de la ley “es vital para proteger a la nación, sus fronteras y ciudadanos”, continuó.
“El Departamento de Justicia continuará defendiendo vigorosamente esta posición, y espera reivindicarla en futuros litigios”, dijo O´Malley, al sugerir una eventual apelación.
El DHS dijo que no comenta sobre litigios pendientes, y la Oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) no ha explicado cuáles serán sus próximos pasos.
La situación es cambiante e impredecible, ante la posibilidad de que la Administración apele y otro tribunal suspenda el dictamen de San Francisco.
En términos prácticos, el dictamen de Alsup afectará las negociaciones bipartidistas en el Congreso para encontrar una solución permanente para los “Dreamers”, porque al desmantelar el programa de “acción diferida” (DACA) de 2012, la Administración fijo un plazo del próximo 5 de marzo.
A menos que intervenga una corte superior, el “DACA” se mantendrá en pie para la renovación de permisos –no se aceptarán nuevos casos- en paralelo a la legislación que logre moldear el Congreso.
Sin embargo, activistas de una vasta coalición de grupos pro-inmigrantes dijeron hoy que el Congreso tiene que dar una solución permanente lo más pronto posible.