La terrible venganza de un reo a pedófilo que llegó a prisión
"Quería que sintiera dolor", confesó el torturador
Brett Peter Cowan (en la foto) fue atacado con agua caliente. Crédito: (Suministrada)
Es común escuchar que los violadores de menores reciben su merecido cuando llegan a la cárcel. Pero de ahí a tener detalles de las venganzas encabezadas por otros reos, eso no ocurre todos los días.
Esta semana, medios internacionales, reseñaron el caso de Adam Paul Davidson, quien cumplía una sentencia en el centro penitenciario Wolston, de Australia.
El reo, convicto de robo y fraude, decidió tomar la justicia en sus manos y vengarse de Brett Peter Cowan, un prisionero que llegó con un mínimo de sentencia de 20 años a cadena perpetua por agredir a sexualmente a menores.
Según confesó a las autoridades carcelarias, planeó por un mes el ataque a Cowan. En agosto de 2016, el tatuador le arrojó agua caliente y le metió la cabeza en un cubo con el líquido cuando el reo jugaba a las cartas con otros prisioneros.
“Yo quería que sintiera el dolor”, agregó el hombre.
“Yo lo hice”, reveló a un oficial de la prisión justo después del hecho.
“Solo yo, nadie más estuvo involucrado. El lo veía venir. Es un jodi** insecto”, argumentó Davidson.
El reo cumplió tiempo adicional por el ataque. Aunque había sido sentenciado a tres años más por torturar a Cowan, el hombre salió de la cárcel con libertad bajo palabra el 28 de noviembre pasado. Se desconoce de cuánto fue la sentencia inicial impuesta a Davidson.
Cowan cumple tiempo por abusar y matar a un menor de 13, en el 2003. De acuerdo con el Daily Mail, el agresor se llevó al adolescente de una parada de autobuses en Queensland’s Sunshine Coast.
Por el caso, Cowan fue arrestado ocho años despues.
El australiano tenía dos convicciones previas por otros casos de agresión sexual a menores.
