Mexicanos en Los Ángeles critican al gobierno de de ese país por baja participación del voto en el exterior

Líderes de organizaciones mexicanas en Los Ángeles culparon a autoridades del Instituto Nacional Electoral (INE) y a los partidos políticos por el “escandalosamente” mínimo de personas -aproximadamente 90,000 entre millones- que podrían emitir su voto desde Estados Unidos antes del 1 de julio, fecha en que se elegirá al nuevo presidente de México.

Hasta el 11 de marzo, consulados del vecino país en el extranjero habían realizado 629,286 trámites de credenciales de elector y de esta cifra, se entregaron 490,000 micas, pero solamente existen 90,976 solicitudes de registro, es decir, apenas el 18% de los documentos han sido activados por las autoridades electorales.

“El número de votantes no es alentador y los responsables directos son el INE y los partidos políticos”, dijo a La Opinión, Raúl Murillo, representante de Hermandad Community Centers, durante el llamado “Foro Cívico: Agenda Migrante frente a las Elecciones de 2018” en el salón Royce de UCLA.

“No hay voluntad de promover el voto y más cuando lo necesitamos”, añadió. “Porque el tema de la migración y los migrantes mexicanos somos la cabeza del debate en Estados Unidos y por todos lados nos están atacando sin que haya nadie que nos defienda”.

De hecho, ninguno de los tres candidatos que lideran los sondeos de preferencia electoral tienen un plan de gobierno que incluya a los migrantes mexicanos.

“Nuestro derecho a participar desde Estados Unidos o desde cualquier parte del exterior en las elecciones para elegir presidente en México continúa como un objetivo a cumplirse”, dijo Juan José Gutiérrez, coordinador de la Coalición Derechos Plenos para los Inmigrantes. “A más de un siglo de haberse proclamado la Constitución mexicana en la Convención de Querétaro que garantizo a todos los mexicanos el derecho al voto efectivo dentro y fuera del país, las autoridades mexicanas permiten que dicho derecho se cumpla parcialmente”.

Voto en el exterior

Hasta el 2006, las autoridades mexicanas no permitieron que se votara desde el exterior. En las elecciones de ese año se emitieron menos de 40,000 votos, y en 2012, se emitieron 80,000 sufragios. A menos de cuatro meses de la elección presidencial, la cifra más reciente apenas alcanza los 90,000, es decir, un incremento de 10,000 electores en todo un sexenio.

“Hay un avance importante, sin duda”, dijo Enrique Andrade González, consejero electoral del INE al ser abordado por La Opinión. “Estamos en una tercera elección [sic]”.

¿Y a usted le satisfacen los números, a sabiendas que en Estados Unidos hay millones de mexicanos que quisieran ver eliminados todos los candados que le han puesto a la posibilidad de que ellos puedan votar?

“Podría ser mejor…”, fue su escueta respuesta.

En Estados Unidos radican más de 36 millones de personas de origen mexicano, de los cuales aproximadamente 12 millones nacieron en la vecina nación, y esta comunidad representa la segunda mayor diáspora en el mundo, solamente superada por la India.

Además de su tamaño demográfico en Estados Unidos, los mexicanos son vitales con su aporte a la economía  de su país, ya que en 2017 las remesas representaron la principal fuente de divisas con un monto de 28,771 millones de dólares, y según la Oficina de Estadísticas Laborales, nueve de cada 15 industrias cuentan con mas de un 10% de trabajadores mexicanos, lo que significa 1.5 trillones de dólares.

“En México, la elección de 2018 representa un momento histórico por la situación que atraviesa el país y un gobierno vecino en el norte que abiertamente se han pronunciado contra México y los mexicanos”, dijo Francisco Moreno, miembro del Consejo de Federaciones Mexicanas en Norteamérica (COFEM). “El gobierno encabezado por Donald Trump ha enfocado su ataque contra la economía mexicana poniendo en riesgo la continuidad del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y ha endurecido la política migratoria, colocando al borde de la deportación a 11 millones de migrantes sin documentos”.

Ante este escenario, Moreno aseguró que es indispensable que los aspirantes a la presidencia de México establezcan con claridad y puntualidad su agenda para la comunidad mexicana que reside en Estados Unidos.

“Mas allá de relaciones entre gobiernos, se debe hablar de relaciones binacionales que involucren a las sociedades que vivimos en ambos países”, sugirió. “Por ello, ante el silencio y la omisión que existe por parte de los aspirantes a la presidencia de México, establecemos que se responda a una agenda de compromisos básicos que proponemos [los migrantes mexicanos]”.

Las elecciones presidenciales de México tienen al candidato Andrés Manuel López Obrador, del Movimiento  Regeneración Nacional (Morena) como puntero en la mayoría de las encuestas, según el más reciente sondeo
de la Consultora Mitofsky para el diario El Economista de México. “AMLO”, como se conoce a López Obrador, representa la coalición Morena-PT- PES. Se mantuvo a la cabeza de las preferencias electorales (27.1%) y aventaja con 4.8 puntos porcentuales a Ricardo Anaya (22.3%) de la alianza PAN-PRD- MC, y, en tercer lugar, José Antonio Meade (18%), del PRI-PVEM- Panal.

Agenda propuesta a los candidatos presidenciales

Los activistas mexicanos residentes en Estados Unidos propusieron que los candidatos a la presidencia de
México ofrezcan:

1. Protección y Seguridad Jurídica: Que se amplíe la red de protección consular, rebasada en la actualidad por las necesidades de protección de la comunidad mexicana e instan a la definición oportuna de un programa que atienda “el grave peligro que vivimos ante el endurecimiento de la política migratoria con carácter xenófobo en contra de la comunidad mexicana”.

2. Mediación por una Reforma Migratoria Justa y Humana: Urgen a los aspirantes a que se definan abiertamente para apoyar a la comunidad mexicana ante el Congreso y gobierno de Estados Unidos para que se reforme el sistema migratorio y se regularice la situación de millones de personas indocumentadas.

3. Empleo y Capacitación Laboral: Se exige a los candidatos presidenciales que cuenten con programas de fortalecimiento a las capacidades laborales, con enfoques binacionales que robustezcan el aporte que los mexicanos realizan a las economías de ambos países.

4. Atención al retorno forzado. Se requieren programas inmediatos y viables para apoyar el retorno forzado de millones de familias, debido a la amenaza de Donald Trump de deportar a más de tres millones de trabajadores mexicanos indocumentados, y atender la hipotética deportación de unos 800,000 jóvenes amparados por el programa DACA, de los cuales el 79% son de origen mexicano.

5. Fortalecimiento del Estado de Derecho en México: “La falta de oportunidades y una política económica que ha castigado los salarios en México es la causa que ha obligado a millones de mexicanos a dejar nuestra tierra, nuestra familia, cultura y costumbres”, dijo Francisco Moreno.“En los últimos años, el contexto de la violencia, corrupción e impunidad han agravado la situación de expulsión”. Para transformar ese contexto, dijo, “necesitamos un país libre, democrático, con oportunidades de desarrollo y en paz; por ello exigimos que se consolide el sistema nacional anticorrupción y fortalecer los mecanismos de transparencia y rendición de cuentas, con instituciones sólidas y un
auténtico Estado de Derecho”.

6. Voto Efectivo y Representación de los Migrantes Mexicanos: Los lideres coincidieron en que los complejos mecanismos establecidos para el ejercicio de los derechos políticos de los mexicanos que residen en el extranjero impiden su pleno y efectivo desarrollo, además ausencia de representación para 36 millones de personas e impedimentos para establecer diálogos abiertos sobre las plataformas políticas partidistas como limitación al pleno ejercicio del derecho politicos.